Prueba Citroën C4 Cactus 2018: redefiniendo el concepto «confort»

Si de algo se han caracterizado a lo largo de su historia los modelos de la marca francesa, es por su comodidad. Cada vez que sale un modelo al mercado, se pone a prueba esta creencia. Esta vez es el turno del nuevo C4 Cactus, el cual presenta una carrocería de berlina compacta junto con una apariencia más refinada, pero manteniendo el ADN de la primera generación.

Tras ser presentado el C3 en 2016, junto con la llegada del SUV C3 Aircross y C5 Aircross el año pasado, la marca francesa ha avanzado en su compromiso con este segmento con el lanzamiento de la segunda generación del C4 Cactus berlina.

Diseño

Prueba Citroën C4 Cactus 2018: redefiniendo el concepto «confort»

Estéticamente -y para el ojo no entrenado- parece que no ha cambiado demasiado, pero nada más lejos de la realidad, si ponemos uno junto a otro vemos que las diferencias son notables. Es evidente que la estética sigue la misma dinámica que inició el primer modelo, pero añadiendo elementos más refinado y estilísticos, alejándose un poco de este aspecto rudo que poseía el anterior modelo.

El nuevo C4 Cactus 2018 se diferencia por su frontal delantero, ya que resalta su anchura y expresividad. Su aspecto robusto marcó un antes y un después tras la implementación de los Airbumps; en este modelo 2018 vemos que se han redefinido, menos inserciones pero más agrupados en la parte baja de la carrocería.

Tenemos un grupo ópticos más refinado -sin la presencia de Airbump-, con la la inserción de las luces diurnas LED dentro de la línea que brota del logo, y se extiende por todo el ancho de la carrocería. La calandra gana diámetro pero también nuevo diseño, el mismo que podemos ver en el C3 Aircross. A su vez, que hay unas tomas de aire más voluminosas y con una branquia en los extremos del parachoques.

 

Paramos al lateral, donde vemos que el Airbump está localizado en la parte baja, con un nuevo diseño y con inserciones de otro color a elegir. Ahora, la carrocería central de las puertas no está cubierta, dejando a relucir una estética más atlética.

En la parte trasera vemos también recibe bastantes cambios; en ella, se encuentra el grupo óptico LED trasero con efecto 3D, que ensanchan el vehículo haciéndolo al mismo tiempo que más moderno. De la misma forma, el parachoques trasero se redefine y pierde también el airbump superior, para adaptarlo en la parte baja del vehículo. De este modelo, el nuevo C4 Cactus tiene un protección 360º contra pequeños golpes.

Su aspecto gana una apariencia de berlina compacta; su arquitectura optimizada procede de la PF1 del Grupo PSA, con una batalla de 2,60 metros. De la misma forma, presenta unos voladizos reducidos que, unido a una batalla considerable, hacen que el nuevo C4 Cactus tenga una mejor habitabilidad interior. Su longitud ha crecido, hasta los 4,17 metros (4,15 metros en la variante anterior), anchura de 1,71 metros y altura de 1,48 metros.

Interior

Dentro vemos que la atmósfera es más limpia. No solo por la mejora de los materiales, sino también por la incorporación de un techo solar amplio. En el interior tenemos un diseño muy familiar, pero con ciertos elementos que si entran como primicias.

Entre ellos encontramos los asientos Advanced Comfort, con espuma de alta densidad que aumenta la comodidad interior. Esta evita todo efecto de hundimiento tras muchas horas de conducción.

Estos asientos ofrecen un confort sin precedentes en la marca, creando nuevas ramas dentro de la comodidad: confort visual (acolchado visible y real); confort postural (con unas banquetas y respaldos anchos, con sujección reforzada); confort de acogida (con un mullido y sujección desde el primer contacto) y, por último, el confort dinámico (espuma estructurada más pequeña en la superficie asociada a una napa de alta calidad en el mismo centro del asiento).

Motor

En el apartado mecánico hay que hacer hincapié en varios apartados, sobre todo en el de la suspensión, ya que equipa como primicia en Europa la suspensión con amoriguadores progresivos hidráulico (PHC). Esta se compone de dos topes hidráulicos situados en los extremos de la barra de suspensión que ayuda a realizar unos recorridos más fluidos, mejorando el confort en marcha. En verdad el “efecto alfombra voladora” se nota, dotando al C4 Cactus 2018 de una conducción muy serena; esta sensación se incrementa por el increíble confort de los nuevos asientos que equipa la nueva generación.

Las unidades que pudimos probar llevaban equipado el motor de 130 CV de gasolina –con cambio manual de 6 velocidades- y la variante de 110 CV de gasolina- transmisión automática EAT6 de convertidor de par-, todas ellas con un consumo muy competitivo dentro del segmento. Hay cuatro bloques en total: tres gasolina –Puretech 130, Puretech 110 y, como entrada de gama, el motor de 82 CV de gasolina- y una diésel (Blue HDi de 100 CV).

Sensaciones

Cada vez que me monto en un modelo de Citroën siempre estoy pendiente de una característica especial, el confort en marcha. Y es que desde prácticamente toda su historia se ha reconocido a la marca francesa como una de las más confortables dentro del mercado. Sin embargo, con la incorporación de cada modelo, se lleva ese estándar de calidad más allá, y esta vez el C4 Cactus 2018 es más cómodo que nunca.

Para empezar hablemos de la suspensión hidráulica progresiva (PHC). Este tipo de suspensión llega por primera vez a un modelo que se vende en Europa –ya que el primer modelo que la equipó fue el C5 que se vende actualmente en China-. A la convención la suspensión de muelle se añaden dos cámaras hidráulicas, en las cuales se van llevando de aceite de manera progresiva según la dureza de las imperfecciones de la carretera; como resultado, tenemos un conducción mucho más serena y confortable al tener un recorrido de la suspensión más progresivo y menos brusco. Esta tecnología viene heredada directamente del mundo del rally.

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Para no desviarnos del ámbito del confort, hablemos de los asientos. Son cómodos, muy cómodos. La nueva espuma de mayor densidad proporciona una comodidad en marcha sin precedentes en la marca, logrando realizar viajes largos sin dolor alguno. Estos han crecido en tamaño, logrando unos hombros más prominentes que recogen mejor el cuerpo. Existe un total de 5 ambientes interiores, lo que se suma a las opciones de personalización exterior para dar lugar a un coche que puedes configurar a tu gusto, hasta un total de 31 combinaciones diferentes en el exterior.

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Pasamos a las prestaciones dinámicas como tal; la dirección tiene un tacto más bien blando, pero comunicativa. La fluidez de esta es grande y, sumado al confort de la suspensión PHC, obtenemos una conducción muy serena. El volante es bastante ergonómico y compacto; de la misma manera, la ergonomía se ha hecho patente en el interior ya que vemos que hasta la pantalla central de 7 pulgadas se ha redirigido al conductor para mejorar la visión del sistema de navegación en marcha. La transmisión manual no es tan buena como esperamos, los motores Puretech son mucho más aprovechables si equipamos la transmisión automática EAT6 de convertidor de par, ya que esta gestiona de forma brillante los cambios según las exigencias del acelerador.

Como he mencionado anteriormente, tuvimos la oportunidad de probar tanto el motor de gasolina de 130 CV –con caja manual- como el de 110 CV –con la caja EAT6-; en ambos la eficiencia es realmente alta, arrojando unos consumos por debajo de los 5,5 l/100 km con relativa facilidad, siempre y cuando seamos gentiles con el acelerador. Sin embargo, el 130 CV se notaba menos reactivo con la transmisión manual que el 110 CV con la transmisión automática; aun así, ambos poseían unas recuperaciones de 80-120 km/h bastante buenas.

La seguridad general del C4 Cactus también ha crecido, ya que tenemos hasta 12 asistencias a la conducción, entre las que se incluye el frenado autónomo de emergencia, reconocimiento de señales, alerta de cambio de carril, sistema de aviso del ángulo muerto, Park Assist (solo controla la dirección), cámara trasera, entre otros. Por tanto, no solo tenemos un coche altamente eficiente, cómodo y elegante, sino que también nos sentimos protegidos con tantos sistemas velando por nuestra seguridad. A todo esto se tiene que añadir la incorporación del Grip Control de PSA, que aumenta las prestaciones en terrenos dificultosos, aunque nuestras unidades no equipaban este elemento, con la llegada de las primeras unidades en marzo a los concesionarios esta tecnología estará disponible en toda la gama excepto en el motor Blue HDi 100 CV.

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En definitiva, el C4 Cactus 2018 ha crecido en todos los aspectos, en unos más que en otros, pero con un progreso constante en la gama. El confort sigue siendo el estandarte de la marca francesa, siguiendo con la tradición de desarrollar los coches más cómodos del segmento. Los motores siguen siendo igual de eficientes que siempre, primando el bajo peso de los modelos para aumentar la autonomía total del coche. Si tenemos que elegir entre las transmisiones nos iríamos hacia la automática de 6 relaciones; por otro lado las calidades tanto interiores como exteriores se han renovado y han adquirido una nueva atmósfera más acorde a las exigencias del mercado. Un modelo redondo que parte desde los 14.900 euros con el motor de 82 CV de gasolina y en el acabado más modesto.