Videoprueba Ford Fiesta ST200 y Fiesta XR2: orgulloso de su nieto

40 años no son nada. Y si no que se lo digan al Ford Fiesta, que tras 4 generaciones ve cómo soplar las velas se convierte en un mero trámite. En Ford han pensado que esto había que celebrarlo, así que se propusieron crear una versión especial que conmemorase ese cumpleaños y ya de paso se convirtiese en el Fiesta más potente de la historia. Así que aquí tenemos al Ford Fiesta ST200, un digno heredero del pedigrí deportivo que ha tenido este pequeño compacto toda su vida.

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Y es que en su momento, cuando las siglas ST aún no rondaban por Ford, el Fiesta ya gozaba de fama como coche de precio razonable con buenas prestaciones. Hablamos del abuelo de nuestro protagonista, el Ford Fiesta XR2. Costaba unas pocas pesetas más que el modelo estándar y te daba la misma alegría que la versión deportiva moderna.

Pasemos al nieto. El Ford Fiesta ST200 se convierte en el Fiesta más potente de producción gracias a como su apellido indica, 200 CV. Esto significa que de ese motor 1.6 turbo se han exprimido 18 CV más con respecto a la versión estándar del Fiesta ST. En la marca estadounidense han mejorado las recuperaciones del coche a media y alta velocidad. Y es cierto, se le nota vivo para acelerar en marchas altas en autopista. Hablando de marchas, en esta versión el cambio ha sido modificado para ofrecer relaciones más cortas que permitan hacer el cambio más rápido y mejor. Otro elemento modificado es la suspensión, mucho más llevadera en el día a día y con carreteras bacheadas. 

Estéticamente no hay color. Bueno sí, el Storm Grey con el que han denominado ese gris claro especial para esta edición. Por lo demás nada cambia con respecto un Fiesta ST, salvo ese logo en el maletero que delata sus 200 CV de potencia. Llantas en negro, pinzas en rojo, en fin la estética deportiva no falta, menos con ese alerón.

Su conducción sí hará que lo eches en falta en tu garaje. Para empezar esa válvula de descarga que te engancha al soltar el pie del acelerador. El sonido del escape también ayuda mucho a querer conducirlo y ya no hablemos su agilidad. Ratón como buen coche de su categoría, se defendió a las mil marvillas de modelos más potentes. 

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Es 3.500 euros más caro el Ford Fiesta ST200 que el ST estándar, pero creemos que merece la pena sólo por todo lo que mejora respecto al ST normal. Sin duda el próximo ST deberá tomar como referencia al ST200.