En un salón dominado por la electrificación, el protagonismo de la jornada recayó indiscutiblemente sobre Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD, quien ofreció una rueda de prensa que podría marcar un punto de inflexión en la historia del fabricante chino. Li no se limitó a repasar cifras, sino que desplegó una visión estratégica ambiciosa, profundamente anclada en la innovación tecnológica y en la consolidación de BYD como un referente global del automóvil del futuro.
BYD rompe récords en ventas globales

La presentación arrancó con una contundente declaración de fuerza: BYD se ha convertido en la tercera marca de automóviles más vendida del mundo en 2024, solo por detrás de Toyota y Volkswagen. Con 4,27 millones de vehículos vendidos –433.000 de ellos en mercados internacionales–, BYD no solo ha consolidado su presencia en China, sino que avanza con paso firme en Europa, América Latina y el sudeste asiático.
Stella Li no dudó en subrayar que este crecimiento no es coyuntural: “Hemos tardado 13 años en alcanzar nuestro primer millón de vehículos de nueva energía, pero tan solo dos meses en pasar de 9 a 10 millones«, afirmó. A cierre del primer trimestre de 2025, la marca ya acumula 11,6 millones de unidades vendidas de este tipo, con un crecimiento del 59,8% respecto al trimestre anterior.

Uno de los mensajes más repetidos por Li fue que “BYD es una empresa tecnológica hecha por ingenieros”. Un lema que se refleja en cifras abrumadoras: más de 59.000 empleados dedicados exclusivamente a I+D, 11 centros de investigación, 24.790 millones de dólares invertidos hasta 2024 y una media de 45 solicitudes de patente al día.
BYD no solo está redefiniendo el concepto de movilidad eléctrica, sino que está anticipando el siguiente gran salto: la inteligencia vehicular. Desde sus avanzadas plataformas e-Platform 3.0 y e4 hasta el revolucionario sistema DiSus de suspensión inteligente, pasando por una batería Blade que ha marcado un nuevo estándar de seguridad y eficiencia, la firma ha convertido la innovación en su ADN operativo.
Stella Li presenta la ofensiva tecnológica de BYD

Uno de los anuncios más destacados fue la presentación del sistema de carga flash por megavatios, desarrollado íntegramente por BYD. Con una potencia de salida de hasta 1.360 kW, una arquitectura de doble pistola y una huella compacta de apenas 1,5 m², este sistema permite añadir 400 km de autonomía en apenas cinco minutos. Una revolución destinada a eliminar uno de los más grandes frenos del coche eléctrico: los excesivos tiempos de recarga.
Li presentó con orgullo las últimas capacidades de conducción autónoma de BYD, demostradas en pruebas como el “moose test” y el “leap test” automatizados. A ello se suman innovaciones como el aparcamiento automático, remoto y valet, que convierten cada desplazamiento en una experiencia sin fricciones, redefiniendo la relación entre conductor y máquina.

Por otra parte, también nos explicó que el crecimiento de BYD no se entiende sin su estrategia de segmentación. Desde el Dolphin Mini como acceso a la gama, pasando por el Song Plus DM-i en el segmento medio, hasta los lujosos Denza Z9GT o Yangwang U9, la marca ha desarrollado una matriz multimarcas que cubre todos los escenarios de movilidad, desde el uso urbano hasta el alto rendimiento.
Con la consigna “Think Big – Play Big”, Stella Li cerró su intervención con una llamada a la acción dirigida a distribuidores y socios estratégicos. “Queremos construir una marca mundial admirable, que inspire confianza, respeto y deseo. No se trata solo de vender coches, sino de transformar el mundo a través de la tecnología”, afirmó, mirando directamente al futuro sin perder de vista el propósito.

La rueda de prensa de Stella Li en Shanghái no fue una simple presentación de cifras: fue una declaración de intenciones. BYD ya no compite solamente en el terreno de la electrificación; está decidida a liderar la próxima etapa de la movilidad inteligente. Y con una estructura industrial tan robusta como su visión tecnológica, parece que no hay vuelta atrás. El futuro no solo será eléctrico, será BYD.