El vehículo compacto Seat León ha sido elegido como el coche oficial para los cuerpos de seguridad de Italia (la Polizia di Stato y los Carabinieri). Por este motivo se ha adaptado para ellos y se ha sometido a un blindaje de la carrocería y cristales.
Para comprobar la efectividad del blindaje se ha sometido a una prueba de balística y duros golpes. La primera prueba consiste en disparar con revólveres 44 Magnum y 357 Magnum al parabrisas reforzado y las puertas. La siguiente prueba consistió en lanzar piedras a través de propulsores. Tras las dos pruebas los cristales estaban resquebrajados pero no cedieron en ningún momento.
La pruebas comenzaron antes con test de durabilidad en las que las puertas fueron abiertas y cerradas 100.000 veces, test de resistencia de conducir 30.000 km solo parando para repostar y cambiar al conductor y la prueba dinámica en la que se simuló una persecución a más de 200 km/h.
Además de las pruebas, el Seat León ha sido adaptado en su interior con soportes para las armas, porta chalecos antibalas en el techo, un aparato de radio y localización GPS, mandos para las puertas, faros de búsqueda, celda en la parte trasera y dispositivos especiales de iluminación y sirena.