Con el Ressence Type 5, la manufactura belga ha querido crear un reloj de buceo comparable en rendimiento a cualquier otro del mercado, pero que al mismo tiempo pudiera tener un uso diario sin los inconvenientes de una gran caja y un grueso cristal.
Así, se ha empleado una solución creativa, el mecanismo se encuentra sumergido en 37,5 mililitros de aceite. Dado que las leyes de la hidráulica afirman que un líquido no puede comprimirse, el aceite compensará la presión bajo el agua.
Además, hay otras ventajas relacionadas con la tecnología de aceite. Los componentes están constantemente lubricados, son más ligeros y, por lo tanto, requieren menos energía para moverse, lo que mejora la precisión y reduce el desgaste.

Pero hay una ventaja adicional del uso de aceite, que es crucial para el éxito de un reloj de buceo. Se anula lo que se conoce como reflexión interna total. Normalmente, estando bajo el agua, un reloj de buceo tradicional tiene que ser visto de frente con el fin de ser leído correctamente, de lo contrario la refracción convierte el cristal del reloj en un espejo. Esto no sucede con el Ressence Type 5 al estar lleno de aceite, lo que le aporta una legibilidad óptima sea cual sea el ángulo de visión.
El Ressence Type 5 tiene un tamaño de caja de 46 milímetros y dispone de un movimiento ETA 2824/2 modificado, ensamblado usando la tecnología punta de la marca belga. Late a 28.800 alternancias a la hora y tiene 36 horas de reserva de marcha y una resistencia a la presión de 10 atmósferas. Existen dos terminaciones, el Type 5B, en titanio pulido y satinado, y el Type 5BB “All Black”, recubierto de DLC negro. El precio de venta al público es de 31.500 euros.