Con motivo de la DS Week, nos hemos desplazado hasta París para probar el híbrido enchufable de la marca francesa, el DS7 Crossback E-Tense, y su hermano pequeño el DS3 Crossback E-Tense, un eléctrico puro. Ambos modelos forman parte de la ambiciosa estrategia de DS, que quiere que todos sus nuevos modelos sean totalmente electrificados a partir de 2025.
En primer lugar, para reconocerlos a simple vista tendrás que buscar en la parte de atrás de la carrocería el apellido E-Tense, sinónimo de electrificación. Son las únicas diferencias estilísticas que encontrarás en las dos versiones.
DS3 Crossback E-Tense
Con una autonomía de 320 kilómetros (ciclo WLTP), el pequeño de la familia se convierte en una seria alternativa para superar la rutina diaria sin mandar emisiones contaminantes a la atmósfera y sin hacer ningún ruido… Pues se mueve por el asfalto en total silencio y con una soltura prodigiosa. Tanto que es capaz de acelerar de 0 a 50 km/h en apenas 3,3 segundos. Más que suficientes para acometer un adelantamiento sin problemas o para ser el primero en salir de un semáforo.
Para gestionar la potencia (100 kW) de su batería (50 kWh) tenemos diferentes modos de conducción. Del mismo modo contamos con una frenada regenerativa que puede ayudarnos a recargar la pila en frenadas pronunciadas. Para activarla solo tenemos que activar la opción B de la palanca de cambios. Es entonces cuando nos olvidamos del freno, ya que con tan solo soltar el pie del acelerador el coche se va frenando. En cuanto te acostumbras estás todo el rato buscando la oportunidad de activarlo para recuperar algo de energía.
Las primeras unidades del DS3 Crossback E-Tense se entregarán en febrero, con un precio que va desde los 38.300 hasta los 43.200 euros.
DS7 Crossback E-Tense, el hermano mayor
El híbrido enchufable pasa por ser la opción más recomendable, tanto por funcionalidad como por capacidad y, sobre todo, por autonomía. Además, al llevar las baterías alojadas en el piso del coche, no pierde maletero respecto a la versión convencional.
Al volante del DS7 Crossback E-Tense la sensación de comodidad y confort no se pierde, incluso aumenta, dado el silencio de la mecánica eléctrica, que predomina en todo momento. En eléctrico puro puede circular hasta 58 km y a un máximo de 135 km/h, algo que pudimos comprobar en las cercanías de París, en cuanto nos alejamos de la congestionada capital de Francia.
Un auténtico 4×4
El sistema híbrido se compone de un motor Puretech gasolina de 200 CV y dos eléctricos de 110 CV en cada eje. La potencia conjunta es de 300 CV y 520 Nm, suficiente para salir despegados si activamos el modo Sport. Como su hermano pequeño, también cuenta con diferentes modos de conducción.
El que más interesante nos ha parecido ha sido el modo 4×4. Dado que se trata de una versión electrificada, lo lógico es llegar a pensar que la tracción a las cuatro ruedas del DS7 Crossback E-Tense solo se debe a que uno de los motores eléctricos va ubicado en el eje trasero, pero lo cierto es que nuestros amigos de DS han ido más allá.
En un interesante recorrido off-road hemos podido comprobar de primera mano las buenas aptitudes del SUV galo. En un día lluvioso y con barro en abundancia, hemos de decir que el coche se comportó sorprendentemente bien en un recorrido ciertamente complicado. Superó todas las pruebas con nota y nos dio una sensación de confianza más que rotunda.
Al igual que el DS3, también cuenta con frenada regenerativa y en todo momento puedes estar informado tanto del consumo de combustible como del flujo de energía en el sistema de infoentretenimiento del vehículo.
Los precios del DS7 Crossback E-Tense oscilan entre los 49.400 y los 54.750 euros.
DS sigue creciendo
En la actualidad hay 31 concesionarios DS en nuestro país y llegarán tres más en el primer trimestre del próximo año. El objetivo es llegar a los 40 puntos de venta.