Porsche ha vuelto a demostrar que sabe como crear coches deportivos sea cual sea el segmento en el que se lo proponga, y su última demostración corre a cuenta del nuevo Porsche Panamera. Aunque ellos no inventaron la berlina, si la hicieron deportiva, exactamente la más rápida del mundo con la versión Turbo. En la cúspide de esa deportividad está el Panamera Turbo, y justo por debajo, el Panamera 4S, pero ¿realmente que los diferencia?
Apellidos aparte, entre el modelo de tracción total y el más potente de la casa hay una serie de diferencias a nivel estético, de mecánica y por tanto de prestaciones, así como de equipamiento y tecnología. En conjunto se entiende por qué hay una diferencia de precio de casi 50.000 euros entre el Panamera 4S y el Turbo.
Sutilezas estéticas
Salta a la vista la elegancia en ambos modelos, pero el Porsche Panamera Turbo adquiere un grado mayor de dinamismo en su carrocería con respecto al 4S. Encontramos un paragolpes delantero diferente, con un detalle estético especial en el Turbo como es la luz inferior de día partida en dos por ese detalle estético de los laterales del faldón. Otro elemento son las llantas, de 20 pulgadas en el Turbo y de 19 en el 4S. En ambas alojan discos de freno de acero, pero el modelo más potente necesita mayor frenada, por lo tanto tenemos discos de 410 mm delante y 380 mm detrás, por 360 mm para ambos ejes en el Panamera 4S.
En su zaga las principales y únicas diferencias son las salidas de escape, de doble salida con cuatro colas de escape redondas en el 4S y rectangulares en el Turbo, y el espectacular alerón trasero. En el Panemera 4S se despliega como una tapa que se levanta, mientras que en el Turbo este se alza y luego se estira, ofreciendo mayor longitud, y además pudiendo seleccionar la altura desde la pantalla táctil del sistema de infoentretenimiento.
Tecnología para marcar la diferencia
Ambos tienen tracción total, pero el Panamera Turbo ostenta el título de referente en su segmento, debido a una serie de tecnologías incluidas de serie. Una de ellas es la nueva suspensión adaptativa de aire con tres cámaras, incluyendo el sistema de control activo de la suspensión de Porsche (PASM), una mejora en el control dinámico deportivo del chasis (PDCC Sport) junto con el Porsche Torque Vectoring Plus ( sistema que controla el par de motor) y una nueva dirección electromecánica. A toda esta innovación tecnológica se une el “Porsche 4D Chassis Control system”, que analiza y sincroniza todos los sistemas del chasis en tiempo real y optimiza la maniobrabilidad del nuevo Panamera.
El otro elemento que sentencia la diferencia entre ambas versiones es la dirección asistida en el eje trasero. Las ruedas traseras giran junto con las delanteras, pero dependiendo de la velocidad actual giran en una dirección u otra. A velocidades inferiores a 50 km/h, las ruedas traseras giran en dirección opuesta a las delanteras hasta un máximo de 2,8º. A esto se le llama “reducción virtual de la carrera entre ejes”. ¿Qué ventaja tiene este novedoso sistema? Proporcionar un mayor dinamismo en los giros y un aumento de la maniobrabilidad a la hora de aparcar. Si superamos la barrera de los 50 km/h, las ruedas posteriores girarán en la misma dirección que las delanteras hasta un máximo de 1,5º. El resultado es una extensión virtual entre los ejes y un aumento de la estabilidad, como por ejemplo en los cambios de carril en carretera.
Un habitáculo de detalles
La comodidad y la perfección son dos términos que describen a la perfección lo que supone estar en el interior del nuevo Panamera. Aunque ambos presentan un interior muy parecido, son los detalles los que hacen que la diferencia esté ahí. Las similitudes son un sistema de información y entretenimiento con una pantalla central de 12.3 pulgadas y el cambio PDK de 8 velocidades. Sin embargo, si ponemos atención vemos que hay elemento especiales en cada versión.
Empezando por el volante, en el Panamera 4S tenemos un elegante volante de tres radios en cuero, que en la versión Turbo incluye dos inserciones de fibra de carbono, una en la parte superior y otra en la inferior. Este elemento cubre otros detalles como las molduras de las puertas, los reposavasos de las plazas traseras, el panel del salpicadero o la tapa de la guantera. En el 4S, estos elementos están cubiertos por molduras de aluminio pulido.
Un corazón clave
Era inevitable hablar se la mecánica, pues es sin duda el elemento más importante a la hora de tener claras las diferencias, pero también de escoger cual llevarnos a casa. El Panamera Turbo no tiene rival con su motor V8 de 4 litros capaz de producir 550 CV. Acelera a niveles de deportivos del más alto nivel, con una marca de 3.6 segundos en el 0 a 100 km/h con el paquete Sport Chrono y el modo Sport Plus.
Por su parte el Panamera 4S, que cuenta con versión diésel, rinde 440 CV en la versión gasolina que probamos, provenientes de un motor V6 de 2.9 litros. Nos sorprendió que en conducción deportiva, el sonido del propulsor de 6 cilindros emitiera un sonido más puro y armonioso que el del V8, quizás porque este se viera algo apagado por la aspiración de los dos turbos. En cuanto a su conducción, ambos ofrecen un empuje endiablado y muy chocante teniendo en cuanta el gran peso que mueven, pero siempre con una contundencia y seguridad imbatibles. Es un coche hecho para circular cómodo y seguro, pero también rápido y de forma ágil se así se desea. No te lo llevarás de ruta, pues para eso están los 911, pero te dará alegría al cuerpo cada vez que se lo pidas.
Hablemos de precios
Y el punto final, el dinero a desembolsar por llevarte la berlina más potente de la historia de Porsche, o la no tan potente. El Porsche Panamera 4S tiene un precio de 128.000 euros, y ciertos elementos tecnológicos menos, además de 110 CV y dos cilindros menos que el Turbo, que tiene un precio de 176.000 euros, y el valor añadido de que te llevas a casa la mejor berlina deportiva que existe ahora mismo.