Pirelli vuelve al hielo de la mano de las GSeries

El fabricante italiano de neumáticos volverá por tercera vez consecutiva a las GSeries como suministrados oficial, en una competición que se ha convertido el referente en hielo en la Península y que comenzó este sábado en Pas de la Casa, el circuito andorrano. Una vez más se usarán en exclusiva los neumáticos de clavos P Zero SA1, que ya han demostrado un gran rendimiento en temporadas pasadas.
 
Pirelli vuelve al hielo de la mano de las GSeries
 
Un año más con la llegada del invierno a los Pirineos, el Automòbil Club d’Andorra ha vuelto ha organizar las GSeries, referente en competición y adrenalina en este tipo de competición. Este años estamos ante la 12ª edición, que tendrá lugar cinco sábados durante los siguientes dos meses (28 de enero, 4, 18 y 25 de febrero y 4 de marzo). En cada uno de esos días de competición habrá cinco fases, siendo todas ellas puntuables de modo independiente, con dos mangas Sprint de seis vueltas , dos rondas Performance con otras seis vueltas y por último la final. 
 
En la categorá reina, la G1, se usan prototipos de tracción a las cuatro ruedas construidos únicamente para las GSeries. Este año debutan junto a estos coches los GIAND Cars, que serán los protagonistas de la nueva copa monomarca, y que son una evolución de los coches que se usaron en 2014. Estos modelos usan un chasis tubular muy ligero con un motor de motocicleta de 1.300 cc y 180 CV de potencia con cambio secuencial, construidos por el preparador PCR Sport. 
 
 
Ambos tipos de vehículos calzarán los neumáticos Pirelli P Zero SA1, con una única medida de 135/85 R15 TT. Este neumático está diseñado para alcanzar la mejor agarre en las tan complicadas condiciones de adherencia del hielo, pero algo que logra sin problemas gracias a sus 224 clavos y un diseño exclusivo en la banda de rodadura que cuenta con un compuesto especial y muy efectivo. En otras palabras, el neumático combina la deformación de la carcasa con la eficacia de la mezcla y el diseño de la banda de rodadura en condiciones de baja temperatura. Si el hielo hace acto de presencia, la tecnología de fijación de los clavos los mantiene siempre firmes en su emplazamiento para garantizar la máxima tracción.