Se cumplen 100 años del nacimiento del que fuera uno de los mayores impulsores de la industria del motor en España, Eduardo Barreiros, el padre de la motorización española. Ahora, con motivo de este centenario, aficionados a sus coches y obra, así como la Fundación Eduardo Barreiros, han celebrado en Galicia varios actos para recordar a este emprendedor y amante del motor incansable.
Todo un homenaje en casa, ya que Eduardo Barreiros era natural de Galicia, que se ha celebrado recientemente con motivo de estos 100 años de su nacimiento, fecha que será el 24 de octubre. Pero aficionados y asociaciones encabezados por el Club Barreirista de Galicia. La concentración de Dodges en la Plaza Mayor de Ourense, la proyección de ‘Barreiros, motor humano’, y el acto en Gundiás, su localidad natal, han sido algunas de las citas más celebradas.
En Ourense, la Fundación Eduardo Barreiros se ha sumado a los actos de homenaje de principios de este mes. Sin duda, el más llamativo de todos y el más espectacular fue la concentración de Dodges en la Plaza Mayor de Ourense, que marcó el arranque de la celebración de dicho centenario. Después se celebró la proyección del documental «Barreiros, motor humano», dentro del Festival de Cine Internacional de Ourense OUFF, en el Teatro Principal de la ciudad. Antes de la emisión, el presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, entregó de unas placas conmemorativas del Festival a la Fundación Eduardo Barreiros, que recibió su hija Mariluz, y a Alfonso Vázquez, presidente del Club Barreirista de Galicia.
Las celebraciones del día siguiente se trasladaron a Gundiás, la localidad natal de Eduardo Barreiros donde se descubrió una placa honorífica en el monumento dedicado a su figura, y al Parador de Santo Estevo de Ribas de Sil, donde en un homenaje presidido por Manuel Baltar, se exhibieron unos paneles recordando la trayectoria vital y empresarial de Eduardo Barreiros.
La presidenta de la Fundación e hija del empresario gallego, Mariluz Barreiros; su nieta, Cristina Comenge; colaboradores de la Fundación; y trabajadores de la factoría de Villaverde como Juan Gayá, exdirector de Diseño de Desarrollo de Motores, y Julián Merino, exdirector general de Ingeniería de Fabricación, se sumaron a los actos y actividades programadas por asociaciones como el Club Barreirista de Galicia, alma mater e impulsor de estas jornadas; el Club Dodge de España; AVICAE; la Asociación Arandina de Clásicos y Memoria Agrícola de la Mancha, para recordar y rendir tributo a Eduardo Barreiros, un ourensano pionero que partiendo de muy poco, llegaría a convertirse en el empresario más relevante de la historia de la automoción española.