Works: El paraíso de Aston Martin

Bienvenidos a WORKS, la tierra de los sueños para los amantes de Aston Martin. Aprovechando una parte de la que fue durante más de medio siglo la fábrica de Aston Martin, se ha instalado un concesionario muy especial, dedicado tanto a los modelos históricos como a los más modernos, sin olvidar los exóticos One-77 o el Vulcan. Aunque en la época anterior no se vendían coches directamente al público, en los tres años que han pasado desde su fundación, se ha convertido en el segundo concesionario más activo de Gran Bretaña

En el taller podemos ver coches de todo el rango de Aston Martin, como un DB5 absolutamente impecable después de una restauración que ha durado 4.500 horas y ha requerido de 60 técnicos. Por cierto, Works ofrece un tarifa fija de restauración “sin sorpresas” por el módico precio de 325.000 libras –algo menos de medio millón de Euros– más impuestos… que más que “sin sorpresas” parece que han incluido todas. 

Works: El paraíso de Aston Martin

Pero no son todos modelos antiguos, Works también repara vehículos modernos, como un DBRS9 –una versión de competición del DB9– que no venía precisamente para un cambio de aceite y filtro porque tenía el motor y la transmisión desmontados y cuidadosamente colocados en unas jaulas metálicas.  La mayoría de los empleados provienen de la antigua fábrica y la filosofía de Aston Martin corre por sus venas. 

El taller de los coches modernos está impoluto, con unos puestos de trabajo que serían la envidia de cualquier mecánico, con un elevador que se oculta en el suelo cuando no se usa, pantallas para diagnóstico y unas herramientas quirúrgicamente limpias –por cierto, se anima a que cada técnico confeccione su propio carro de herramientas siguiendo sus gustos particulares. Más ruidoso es el área de restauración, sobre todo la zona donde se trabajan los paneles de aluminio para llevarlos a su forma, contando con herramientas específicas, mucho tiempo y una habilidad extraordinaria que lleva años adquirir. 

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Antes, los contrastes eran tan grandes que no se podía considerar Works como un todo. Por un lado, la brillantez de la exposición de ventas, la limpieza de la zona de pintura, el revuelo del área de restauración de paneles… Cada zona era un mundo diferente. Pero ahora se han unido con un puente imaginario que coloca en el mismo lugar a un Vantage nuevo, a un DB MkII superviviente de mil batallas o un DBRS9 de carreras, todo bajo el paraguas del respeto y la admiración a una marca. Porque, para los amantes de Aston Martin, Works es el paraíso.