Lamborghini Jarama (1970)

Ya se sabe que Feruccio Lamborghini tenía predilección por los nombres taurinos y españoles, así que eligió el del circuito madrileño. El Jarama se lanzó en 1970 por supuesto con motor V12. Derivaba del Islero (el toro que mató a Manolete), pero con una carrocería muy diferente, obra de Gandini. Hubo dos versiones, Jarama (1970) y Jarama S (1972).
Ferrari Monza SP2 (2018)

Monza es posiblemente el nombre de circuito más usado para llamar a automóviles, el último de ellos la barchetta sobre la base del 812. Antes hubo Alfa 8C 2300 Monza (1931), Chevrolet Corvair Monza GT (1962) o Lamborghini 400 GT Monza (modelo único de 1966), Y por supuesto el Opel Monza (1978), que compartía plataforma con la berlina Senator.
Shelby Daytona Coupé (1965)

Al Ferrari 365 GTB/4 lo conocemos como “Daytona”, pero no es su nombre original. Menos conocido es el Cobra Daytona Coupé. Fue un derivado del Shelby Cobra pero con una nueva carrocería. Esta, muy parecida la de su rival el Ferrari 250 GTO, le permitía ser más largo, más aerodinámico y más estable. Gracias a ese nuevo diseño en 1965 dominaron el campeonato FIA para coches de Sport en la categoría GT. Solo se hicieron seis, pero hay muchas réplicas y, en 2015, Shelby hizo una serie de 50 unidades. Uno de los nombres de circuito más icónicos para uno de los coches más imponentes.
Pontiac Le Mans (1971)

Las 24 Horas se disputan en el circuito de la Sarthe, que toma su nombre del departamento en el que está la localidad de Le Mans. Ferrari también tiene un modelo con este nombre, el 250 LM con motor central. El Pontiac Le Mans nació en 1961 como la versión más alta del Tempest, y más tarde se llamó solo Le Mans. Hasta 1993 hubo cinco generaciones. En definitiva uno de los nombres de circuito que más apellidos a firmado.
Maserati Kyalami (1976)

Toma su nombre del circuito sudafricano donde se disputó la F1 durante años. Fue el primer Maserati que se lanzó tras la compra de la empresa por Alesandro De Tomaso, usando el De Tomaso Longchamp como base. La carrocería la modificó ligeramente Frua, y se hicieron 210 unidades hasta 1983. Maserati también vendió el Indy (1969), por Indianápolis.
Audi Avus Quattro (1991)

Este prototipo fue un avance de la tecnología de construcción de carrocerías en aluminio, que tomaría forma por primera vez en un modelo de serie en el Audi A8 de 1994. Para destacar el aluminio la carrocería iba pulida. La marca anunció que llevaba un 6.0 W12 en posición central y las puertas se abrían al estilo tijera, como en los Lamborghini.
De Tomaso Vallelunga (1965)

Con el nombre del circuito romano, fue el primer coche de calle creado por Alessandro De Tomaso, que antes había creado monoplazas. El pequeño Vallelunga (3,87 metros de largo) con mecánica Ford de cuatro cilindros fue muy avanzado porque incorporó motor central, antes de que lo hiciera el Lamborghini Miura de 1966. Se hicieron poco más de 50 unidades.
Bentley Brooklands (2007)

Hubo una berlina Brooklands en los 90, pero este es el bueno. Tiene el estilo de los enormes Continental de los años 90, antes de que VW comprara la empresa en 1998. Solo se hicieron 550 unidades y usaba la plataforma de los Arnage/Azure. La línea con el techo bajo resulta muy elegante, y llevaba un V8 biturbo de 540 CV. El circuito de Brooklands en Surrey (GB) se inauguró en 1907, y era una especie de semi-oval (con forma de riñón) peraltado.
F. 559 GTB Fiorano (2006)

Sustituyó al Ferrari 550 Maranello de 1996, y supuso una revolución técnica con su nueva carrocería monocasco de aluminio. Su V12 de 620 CV derivaba del usado en el Enzo. Su sobrenombre hace referencia al circuito de Fiorano, la pista de pruebas privada de Ferrari inaugurada en 1972. Allí se prueban tanto los monoplazas como los coches de calle.
Chrysler Sebring (2001)

¿Quién dice que todos los coches de esta página son inalcanzables? El Sebring se vendió en España desde 2001 como berlina, y luego llegó el descapotable con cuatro cilindros o V6. Toma su nombre del famoso trazado de Florida (EE UU). En 2008 se lanzó el Sebring 200 C Cabrio, más feo que el primero. Maserati también tuvo un Sebring, lanzado en 1962.