Esta novedosa tecnología se beneficia de la tecnología de sensores de visión inspirados en el ojo humano para ampliar las capacidades actuales de ayuda a la conducción y de conducción autónoma, generando una visión artificial.
Carlos Ghosn, presidente director general del Grupo Renault, afirmó que Renault había llegado a un acuerdo con Chronocam SA para desarrollar esta tecnología. Chronocam ha recogido experiencia a la hora de desarrollar la visión artificial de la detección de la visión neuromórfica que imita al ojo humano, un proceso semejante al que realiza el propio cerebro humano.
Con esta nueva «visión artificial» se contribuye a mejorar la conducción en diferentes aspectos como detectar de manera más rápida de obstáculos y personas, un incremento del rendimiento de las cámaras para detectar mejor y adaptarse a las condiciones del entorno y una reducción del coste total de instalación, siendo de esta manera más accesibles a un mayor numero de vehículos, mejorando la seguridad vial.
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Ambas empresas trabajarán de forma conjunta para desarrollar este tecnología propuesta por Chronocam en diversos ámbitos como: evitar colisiones, proporcionar asistencia al conductor, proteger al peatón, detectar los ángulos muertos, junto con otras funciones para mejorar la seguridad y la eficacia de la conducción humana y autónoma.
«Nuestra ambición es convertirnos en una de las primeras marcas en proponer una tecnología de conducción «sin manos y con los ojos cerrados» en los vehículos fabricados en serie a un precio asequible. Por ello, nos complace trabajar con Chronocam en una tecnología de visión por ordenador. El objetivo es proponer ayudas a la conducción aún más seguras y más asequibles y avanzar progresivamente hacia los sistemas de conducción autónoma», afirmó Gaspar Gascón, vicepresidente y director de Ingeniería del Grupo Renault.