¿Puede el novato Alonso ganar en las 500 Millas? Diez debutantes lo consiguieron antes que él

¿Cuántas posibilidades tiene un debutante en la Fórmula 1 de ganar un Gran Premio? Hoy en día ninguna. Pero en el campeonato IndyCar y en la Indy500 el novato Alonso sí puede ganar. Sin ir más lejos, el año pasado venció Alexander Rossi, con el que nadie contaba a priori. Fernando Alonso sí cuenta para muchos, y sabe que diez debutantes lo consiguieron antes que él.

¿Puede el novato Alonso ganar en las 500 Millas? Diez debutantes lo consiguieron antes que él
Fernando Alonso atiende a los aficionados tras los entrenamientos en Indianápolis.

 

Todos los pilotos que competirán mañana en la 101º edición de las 500 millas de Indianápolis se acuestan la noche anterior soñando con la gloria. Y es que la historia nos ha enseñado que un debutante tiene posibilidades de ganar, aunque no tantas como los veteranos. En los últimos veinte años solo lo han conseguido tres pilotos: Juan Pablo Montoya en 2000 (en la foto que abre este reportaje), Helio Castroneves en 2001 y Alexander Rossi el año pasado.

Antes que ellos lo logró Graham Hill en 1966 (el único piloto que tiene la Triple Corona (GP de Mónaco, Indy500 y 24 Horas de Le Mans). Y para encontrar otros novatos vencedores hay que retroceder hasta principios de siglo: Ray Harroun (1911), Jules Goux (1913), René Thomas (1914), Frank Lockhart (1926), Louis Meyer en 1928 y George Souders en 1927.

El debutante Alexander Rossi cruzando la meta como ganador en 2016.

Como se pueden imaginar la clave para que un debutante pueda ganar está en la igualdad mecánica. Todos los equipos usan en sus monoplazas el mismo chasis Dallara de fibra de carbono, y las mecánicas son 2.2 V6 biturbo que suben hasta 12.000 rpm. y cuya potencia oscila entre 550 y 700 CV dependiendo de la presión de sobrealimentación. El combustible es E-85 (85% etanol y 15% gasolina) y solo hay dos fabricantes de motores: Chevrolet y Honda, que será el que utilizará el novato Alonso.

Rossi besa el trofeo Borg-Warner, en el que se incluye el rostro en plata de cada uno de los ganadores.

También es el mismo motor que llevaba Alexander Rossi el año pasado. Para el desconocido Rossi fue su primera victoria como piloto IndyCar y era debutante en la prueba, de modo que su triunfo fue toda una sorpresa. Se impuso por 4,5 segundos al segundo, Carlos Muñoz. De hecho en el dossier oficial de la prueba, que celebraba su centenario, se incluía un reportaje sobre las estrellas emergentes de la IndyCar y ni siquiera se mencionaba a Rossi.

Helio Castroneves venció en su debut en 2001. En la imagen, el coche del piloto brasileño el año pasado.

Este californiano de 25 años compitió en 2015 en la F1 dentro del equipo Manor, alternando su plaza con nuestro compatriota Roberto Merhi. Entre arrastrarse por el mundial con el peor coche de la parrilla o saborear las mieles del triunfo en Indianápolis, está claro que no hay color. La clave de su victoria estuvo en que Rossi llegó al límite del combustible, cruzando la meta 36 vueltas después de su último repostaje. Se estima que la autonomía del motor Honda es de unas 32 vueltas. De hecho la ultima vuelta la hizo “parado”, a 289 km/h de media, mientras que el segundo clasificado la realizó a 350 km/h. Su jefe le decía por la radio: “¡no dejes que te pasen pero ahorra combustible!”. Los aproximadamente treinta monoplazas deben recorrer en el circuito oval un total de 500 millas (804,6 km.). Como la velocidad media por vuelta ronda los 370 km/h y el trazado mide 2,5 millas, les bastan unas tres horas para recorrer las 200 vueltas de las que consta la carrera.

Los repostajes y los cambios de neumáticos también son esenciales. En la imagen, el coche de Conor Daly en 2016.

Las estadísticas dicen Rossi que fue el décimo debutante que consiguió ganar en su primera Indy500. Uno de los favoritos era el brasileño Tony Kaanan, quien venció en 2013 y en 2016 acabó cuarto. “Honestamente no le conozco bien” dijo refiriéndose a Rossi, “pero le doy la bienvenida al club, que es el mejor club del mundo. No tiene ni idea de cómo va a cambiar su vida. Puede que no le conocieran esta mañana, pero ahora todos saben quien es”. Fernando Alonso no necesita más fama, su objetivo es la Triple Corona.