Renault no está dispuesta a dejar morir a los monovolúmenes en favor de la oleada de SUVs, pues esto implicaría peder un modelo con tanta tradición dentro de la marca como el Espace. La actual generación llegó en 2015 y ahora dos años después recibe una ligera actualización en ciertos apartados, dando la bienvenida a la denominada Renault Espace 2017. No le busquéis las diferencias porque no las hay, al menos exteriormente, pero si se han añadido ciertos elementos para que siga siendo la número dos del segmento D de monovolúmenes.
De su diseño poco o nada ha cambiado, ya lo hizo cuando tocaba hace dos años, escorándose hacia la estética crossover pero manteniendo un diseño reconocible como la Espace de toda la vida. Se añade un nuevo color al catálogo, el Gris Titanio, nuevas llantas, unas de 18″ denominadas Argonauta y otras en 19″ llamadas Black Quartz. Los tamaños de estas seguirán yendo entre las 17 y las 20 pulgadas. Sus faros siguen siendo la nueva firma lumínica que estrenó en su día, en forma de C y Full LED.
Por dentro el Renault Espace 2017 tampoco presenta demasiados cambios más allá de la opción de asientos ventilados, muy aconsejable si se opta por tapicería de cuero, la cual ahora puede ir en el color Gris Arena. Se añaden luces de iluminación ambiente a la guantera y a la parte de portaobjetos de debajo de la consola central. En lo tocante al sistema multimedia se actualiza al R-Link 2 con Android Auto y Apple CarPlay. El portón del generoso maletero, 719 l ampliables a 2.035 litros sin la segunda fila, es eléctrico y se puede accionar mediante el sistema del gesto del pie bajo el paragolpes. El Espace 2017 sigue ofreciendo las 7 plazas como opción, solo disponible en los acabados Zen e Initiale París.
Ahora bien, si hay una novedad reseñable es la mejora de la versión de gasolina dentro de sus motorizaciones. Las diésel se mantienen, con el dCi de 130 CV y de 160 CV, asociados al cambio manual de 6 relaciones y automático de 6 velocidades respectivamente. Anteriormente la nueva Espace llegó con un 1.6 gasolina de 200 CV que ahora pasa a ser el TCe 225 CV de 1.8 litros. La ganancia de potencia viene dada por el aumento de la cilindrada así como otra serie de mejoras en admisión, la cadena de transmisión, inyectores y otros elementos que mejoran su eficiencia y capacidad de rendimiento.
Este es el motor que hemos podido probar hoy en el Renault Espace 2017 ha demostrado ser muy resolutivo en ciertas situaciones y mover a la perfección al gran monovolumen del segmento D. Dentro de los cinco modos del Multisense (Sport, Eco, Confort, Normal y Personalizado) con el modo Sport seleccionado la respuesta es inmediata y contundente desde el medio régimen, habiendo ganado más par y rapidez a bajo régimen de revoluciones en comparación con el anterior motor gasolina. El ruido que hace se amplifica por los altavoces y se edulcora un poco por lo que no acaba de ser bonito, quizás habría sido mejor no optar por ese recurso. En el resto de modos el coche presenta un buen aislamiento y en una conducción normal apenas notaremos el ruido.
Responde muy bien con la caja de cambios automática EDC7, la cual podemos dejar que gestione el solo o poner en modo manual mediante la elegante palanca de cambios en el salpicadero. Su accionamiento es bastante suave y la respuesta inmediata sin ser vertiginosa, más que adecuada para este coche. Acompañado del sistema de ruedas traseras directrices 4Control, imprescindible en este coche, su manejo es sensacional en cualquier carretera y la respuesta del motor acompaña bien en los adelantamientos. Sin embargo, desde parado, el eje delantero flota en exceso al hundir el pie del acelerador hasta el fondo, pero es algo que dura apenas dos segundos y en seguida volvemos a tener el control total del coche. Si somos suaves y aceleramos gradualmente este signo no aparece.
Renault asegura un consumo mixto homologado para el Renault Espace 2017 TCe 225 de 6.8 litros pero en la prueba de hoy, mayoritariamente por ciudad y carretera secundaria hemos rondado los 10 litros. Puede parecer mucho pero la ruta no le hacía justicia al coche en este aspecto y además hay que tener en cuenta que sin extras el coche pesa más de 1.600 kg.
Desde ya se puede pedir en concesionario la actualización del Espace, con un precio de partida de 30.195 euros para el nivel de equipamiento Intense y el motor dCi 130. Si se sube de nivel en ese motor serían 32.827 euros. El motor diésel más potente parte en 35.929 euros para el acabado Zen y 43,524 euros para el Initiale París. La versión probada con el acabado Initiale París son 44.747 euros y en la versión inferior de equipamiento Zen 37.152 euros.