Hace ocho meses que Nissan nos presentó la renovación de su utilitario del segmento B, el nuevo Micra. Un coche que llegó en 1983 y que cuajó enseguida en el mercado gracias a su sencillez y practicidad. Hoy esta quinta generación del Nissan Micra se produce en Europa para Europa, y parece que ha gustado porque desde marzo han vendido 46.000 unidades. Ahora la firma japonesa añade a la oferta un tercer motor, un 1.0 gasolina de 3 cilindros que entra como acceso a la gama. ¿Es el Nissan Micra 1.0 la mejor versión?
Al nuevo Micra ya lo conocimos en marzo, y en su llegada se planteó con dos motores, el 0.9 gasolina de 90 CV y el diésel 1.5 DCi de 90 CV también, siendo este el único que podía montar cambio automático. A finales del año que viene la caja CVT llega al 0.9. Por debajo de ese motor gasolina en precio, se introduce ahora el 1.0 de 3 cilindros gasolina.
Es de origen Renault, y con sus 999 cm3 produce unos modestos 71 CV y 95 Nm de par, contando con una velocidad máxima de 158 km/h. La marca homologa un consumo medio de 4,6 litros a los 100 km, que sumado a su depósito de 41 litros permite, según la marca, 891 km de autonomía. Si bien es cierto, la motorización de gasolina es la más lógica en un coche de este segmento, y así lo es también en el pequeño Micra.
Aunque solo tiene que mover apenas 1.100 kg de peso, le cuesta hacerlo si hay una pendiente o no llevamos la marcha más óptima. El Micra 1.0 se mueve bien, con soltura, a cambio de ir jugando con su caja manual de 5 velocidades. El tacto de esta es buena y los recorridos los que cabría esperar en un coche de este segmento, así que cero pegas en este sentido.
La primera marcha permite salir con bastante inercia y la segunda es casi de transitoriedad hasta alcanzar los 50 km/h máximos de ciudad, metiendo la tercera en cuanto sea posible. En territorio urbano el Micra 1.0 se mueve bien por tamaño, son 3,499 mm de largo y 1,740 de ancho, y por potencia. Los 71 CV son más que suficientes para lo que el coche está pensado.
Ahora bien si salimos de la ciudad, en carreteras secundarias como las que hoy hemos transitado por Francia, necesita de cierta viveza con el acelerador para llegar al máximo de la vía, pero luego se mantiene sin problema la velocidad una vez llegamos. Dado que en autovía coge los 130 km/h (recordad que lo hemos probado en Francia), creo que juzgando al motor como el tres cilindros que él, solo se queda «corto» al adelantar un camión. Por lo demás es perfecto para lo que se va a usar el Micra, que es moverte por ciudad.
Además una de las mejoras de esta generación del compacto de Nissan es que gana habitabilidad interior, lo cual permite una posición de conducción muy buena para un coche del segmento B. La regulación del asiento, muy mullido y cómodo por cierto, más el ajuste del volante en altura y profundidad, permiten una buena posición, muy dinámica. Detrás hay espacio de sobra para dos ocupantes más, o tres, y su maletero de 300 litros tampoco se queda corto, En cuanto a la suspensión, creo que tiene el tarado perfecto para ciudad y ofrecer buena estabilidad en carreteras con curvas.
Nissan siempre apuesta por la tecnología, y el Micra es un coche que cuenta con sistemas únicos en su segmento. Algunos de ellos son el sistema de frenado de emergencia en ciudad, con detección de peatones incluida. También el Intelligent Line Assist, para mantener el coche en el carril por el que se circula, o el Trace Control, que ayuda a garantizar una trayectoria óptima en el paso por curva. Tenemos cámara de visión trasera con modo 360 grados, y el espectacular sistema de audio BOSE de 6 altavoces, con dos de ellos integrados en el reposacabezas del conductor.
El precio del Nissan Micra con el motor 1.0 gasolina es de 9,900 euros, lo cual le deja en muy buena situación en cuanto a precio frente a la mayoría de sus rivales. Hay un pack muy interesante que se llama Pack Techno que incluye el navegador, la cámara de visión trasera y el sistema de audio BOSE por solo 600 euros.