Los comienzos nunca son fáciles, y eso lo sabe la marca japonesa que desde 1954 lleva dando guerra en el mercado mundial, donde se escribió el nombre de Suzuki Motor Corporation Limited por primera vez. Fieles a su lema «Yaramaika» (algo así como «Hagámoslo») hicieron un gran estudio de mercado para buscar los mejores modelos del mercado extranjero, lo que les proporcionó una visión clara de lo que deberían hacer; de esta manera vio la luz el Suzulight.
Michio Suzuki, quien dirigió el desarrollo del primer modelo, se basó en una comparación realizada entre varios vehículos europeos, focalizando su atención en un Austin 7 construido en Reino Unido -muy laureado por ser un coche con una gran calidad-precio para la época-.
Con toda la información adquirida, comenzaron a desarrollar su propio modelo, el Suzulight, el cual era un coche de pequeñas dimensiones que apenas pesaba 500 kg. Su fin era claro, ser un coche fácil de conducir y de mantener, a la vez que económicamente accesible. Montaba un pequeño corazón de solo 2 cilindros y 360 cc, lo que le daba una potencia de 16 CV
Era ligero y compacto, con solo 2.990 mm de largo, 1.295 mm de ancho y 1.400 de alto. Con sus medidas bien definidas, el Suzulight no tuvo problemas para cumplir la legislación japonesa de «Keijifdosha«, por lo que comenzaron al poco tiempo con sus primeros test.
En fase de prototipo tuvo un desafío bastante duro: un viaje largo surcando las carreteras de la región montañosa de Hakone entre Hamamatsu y Tokio, las cuales estaban no muy bien asfaltadas. Llegó de noche a Tokio y el equipo se presentó con el Suzulight ante el presidente «Yanase»- el cual probó el coche- y a la oficina del Gobierno del Automóvil.
Llegó octubre de 1955 y ya tenían todo lo necesario para entregar las primeras dos unidades, las cuales fueron entregadas a dos médicos; se comenzó con una producción de 3-4 coches por mes, aunque a principios del año siguiente ya el volumen mensual había crecido hasta las 30 unidades. A día de hoy, poco se sabe de los paraderos de estos coches, más allá de rumores sobre la existencia de uno o dos modelos originales de Suzulight, uno de ellos descansa en el Museo Suzuki Plaza en Hamamatsu, Japón.

La filosofía que dio vida a este modelo sigue presente en la actual gama de Suzuki, como el Ignis, el Swift o el Baleno, los cuales cuentan con las últimas plataformas compactas de la marca. El siguiente lanzamiento de este tipo de vehículos será de la mano de la variante deportiva del Swift, la cual llegará al mercado en junio de 2018.