El Opel GT Concept celebrará su presentación mundial en la 86ª edición del Salón Internacional del Automóvil de Ginebra 2016. Este deportivo se muestra impresionante en sus formas, simplificado a lo esencial y auténtica pasión. Es un pura sangre con motor central delantero y tracción trasera, descendiente directo del Opel GT y del concept Monza y lleva la filosofía de diseño escultural de Opel hasta un nuevo nivel. El Opel GT Concept no tiene manillas en las puertas, ni retrovisores exteriores o limpiaparabrisas.
El Opel GT Concept seguirá los pasos del famoso Opel Experimental GT en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra. En 1965, sólo un año después de la inauguración del primer estudio de diseño de un fabricante europeo, Opel presentó en el Salón de Frankfurt este afilado y expresivo coupé, con la fiable tecnología del Kadett B. Sin embargo, no fue innovador sólo por ser el primer coche presentado por un fabricante europeo, si no que el GT deslumbró con innovaciones como sus faros delanteros escamoteables y por mostrar una forma esbelta junto con unas perfectas proporciones sin ninguna decoración innecesaria.
Una dinámica máquina para conducir que desde el principio queda simbolizada por la característica línea roja que proporciona la carrocería del vehículo y la divide horizontalmente. Las singulares ruedas delanteras en color rojo, montadas sobre llantas con un atrevido diseño inspiradas en un monopatín, evocan a las de la motocicleta Opel Motoclub 500, que también fue innovadora en su tiempo y lucía con orgullo, en 1928, dos ruedas rojas. Aparte de eso, el GT no tiene demasiados vínculos con el pasado. El largo capó, la ausencia de una tapa del maletero, el doble escape central y, por supuesto, el nombre, hacen recordar al GT original. A partir de ahí, el GT es independiente sin ninguna reminiscencia retro en su diseño.
Una innovación clave del Opel GT son las grandes puertas con las ventanillas laterales integradas que muestra una transición sin fisuras entre el cristal y las zonas pintadas. Tanto el conductor como el acompañante pueden acceder al sorprendentementeyhu amplio interior simplemente tocando el “touchpad” (panel táctil) de las puertas eléctricas que está integrado en la característica línea roja del techo. Incluso los conductores de mayor estatura tendrán suficiente espacio en el interior. Las puertas se “sumergen” considerablemente en los pasos de rueda delanteros al abrirse. Estos montantes que ahorran espacio y están patentados permiten un gran ángulo de apertura, especialmente en plazas de aparcamiento estrechas. El deportivo compacto está, de esta forma, especialmente optimizado para su uso en zonas urbanas. Dos cámaras montadas tras los pasos de ruedas aseguran una buena visión al circular por ciudad. Transmiten sus imágenes a sendos monitores colocados a derecha e izquierda del habitáculo con lo que los espejos retrovisores exteriores con ángulos muertos tienen los días contados. El parabrisas se continúa con un techo panorámico de cristal, permitiendo a los ocupantes disfrutar de una experiencia de conducción similar a la que tendrían con un techo Targa desmontable.
El afilado capó desvela el motor del concepto GT: al igual que en el Opel GT original y en el icónico deportivo americano Corvette – fabricado también por GM – el motor está colocado en posición central delantera. De esta forma, el centro de gravedad del vehículo se sitúa muy bajo y centrado, algo ideal para un comportamiento dinámico y excelente en curvas. ElOpel GT tiene un potente motor de tres cilindros, con 1.0 litros de cubicaje y turbocompresor, basado en el moderno motor completamente de aluminio que se utiliza en el ADAM, el Corsa y el Astra. Este eficiente motor de gasolina y alta tecnología desarrolla 145 CV/107 kW con un par máximo de 205 Nm en su faceta deportiva (los datos de consumos y emisiones del GT no están aún disponibles). El motor turbo envía su potencia a las ruedas traseras a través de una caja de cambios secuencial de seis velocidades que se maneja con las levas del volante. Así, el Opel GT ofrece la tracción trasera tan apreciada por los amantes de los deportivos puros. Las prestaciones de este biplaza, con un peso total por debajo de los 1.000 kilos, también se corresponden. Acelera de 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 215 km/h.