La firma checa amplía su gama con un SUV nacido de la prestigiosa plataforma MQB del Grupo Volkswagen, para competir en una liga con cada vez más rivales. “Con el Skoda Kodiaq, estamos tomando una nueva dirección y abriéndonos a nuevos mercados”, explica el CEO de Skoda Bernhard Maier. “Con nuestro primer SUV grande estamos añadiendo un nuevo segmento a la marca y consecuentemente, nuevos grupos de clientes. Esta novedad en nuestra gama es fuerte como un oso: hace la marca todavía más atractiva gracias con su concepto de diseño atractivo y es el primer Skoda que tiene la opción de estar siempre online, ofreciendo el máximo confort, seguridad e información a tiempo real”.
La metáfora del oso no es por casualidad, si bien este nuevo modelo toma el nombre de un popular oso de Alaska, el Kodiak. Quizás por eso la presentación mundial tuvo lugar en Berlín, cuyo símbolo también es otro oso. El caso es que durante el evento pudimos contemplar en primera persona al Kodiaq y quedamos gratamente sorprendidos.
En lo que se refiere al diseño exterior luce unas formas robustas y elegantes que se realzan con unos pequeños grupos ópticos en el frontal. En los faros traseros, según el responsable de diseño de Skoda, Jozef Kabañ, se han inspirado en la tradición del cristal Checo, que también se refleja en la interacción de luces y sombras de las superficies altamente contorneadas de este SUV. En general, pensamos que el nuevo SUV se diferencia bastante bien de la competencia, incluidos sus “familiares” del Grupo Volkswagen.
Por comparar medidas es casi 35 cm más grande que el Seat Ateca (4.363 m), 32 cm más que el Nissan Qashqai (4.377 m) y 21 más que el VW Tiguan (4.486 m). Nuestro protagonista mide 4.697 metros de largo, 1.882 de ancho, 1,676 de alto (incluyendo las barras del techo) y tiene una distancia entre ejes de 2.791. Esas generosas dimensiones permiten albergar una tercera fila de asientos (en opción) y todavía dejar espacio para el maletero. En condiciones normales, con cinco asientos, la capacidad de carga es insuperable: 720 litros, que pueden llegar hasta los 2.065 litros.
Cinco propulsores, dos TDI y tres TSI forman la gama de motores en su lanzamiento, previsto para enero de 2017. En diésel habrá dos 2.0 TDI: uno con 150 CV y 340 Nm y otro de 190 CV y 400 Nm. Los gasolina serán dos TSI 1.4 y un 2.0. La versión de entrada de este compacto tetracilíndrico genera 125 CV y 200 Nm. Un escalón por encima encontramos el 1.4 de 150 CV y 250 Nm. Por último, el 2.0 TSI desarrolla 180 CV y 320 Nm. En función del motor se ofrece la caja manual de 6 marchas o la DSG de 6 o 7 relaciones.
El sistema de tracción total con control electrónico está disponible para la mayoría de variantes y permite remolcar hasta 2.5 toneladas. Como opción también se ofrece el Selector de Modo de Conducción que permite al usuario ajustar la gestión del motor y el cambio DSG, la dirección asistida , el aire acondicionado y otros sistemas en modo Normal, Eco, Sport e Individual. Las versiones de tracción total ofrecen también el modo Snow que adapta el funcionamiento de los sistemas ABS, ASR y ACC (si lo incorpora) y la gestión del motor junto al embrague multidisco electrónico.
Nosotros todavía no hemos podido conducirlo pero sí nos hemos sentado a los mandos y la sensación de confort es de primer nivel. Tanto los acabados como la ergonomía son notables. En el salpicadero domina una generosa pantalla táctil de 8 pulgadas desde donde se puede controlar todos los sistemas de conectividad e infoentretenimiento. Y, como en todo nuevo Skoda, no pueden faltar las soluciones “Simply Clever”.
Entre ellas está la protección de las puertas que, gracias a unos muelles, despliega automáticamente un soporte de goma para evitar que la parte metálica de las mismas golpee contra la pared u otro coche. Cuando se cierra la puerta, el ajuste se pliega hacia adentro y queda totalmente oculto. Del mismo modo, el cierre infantil eléctrico para las puertas traseras, la comunicación interna del coche o los reposacabezas de descanso están disponibles como extras por primera vez en la marca. En total, el Kodiaq ofrece más de 30 características “Simply Clever”, siete de la cuales son totalmente nuevas.
A la hora de configurarlo se puede escoger entre 14 colores de pintura, cuatro sólidos y diez metalizados, y que habrá tres niveles de acabados, como es costumbre en la gama Skoda: Active, Ambition y Style. Todavía no se han anunciado los precios oficiales para el mercado español.