Nuevo Audi e-tron: el primer eléctrico de los cuatro aros

Hoy ha sido desvelado en San Francisco (California) el nuevo Audi e-tron, el primer vehículo de producción 100% eléctrico de la firma alemana. Este hecho marca la entrada de otro fabricante de primer nivel en el mundo de la propulsión eléctrica, una “moda” que parece marcará el futuro cercano de la automoción. Con motivo de esta presentación, desde la Revista CAR hemos tenido la oportunidad de conocer en primicia al e-tron, un modelo muy especial para Audi, que equipa lo último en tecnología y que nos presenta un concepto de diseño innovador.

Nuevo Audi e-tron: el primer eléctrico de los cuatro aros

Un nuevo concepto de diseño

Para empezar, y a fin de facilitar su categorización, es importante mencionar que el Audi e-tron ha sido presentado como un SUV con medidas que lo sitúan entre los Audi Q5 y Q7. En concreto, el nuevo modelo presenta dimensiones de 4.90 metros de longitud, 1.61 metros de altura y 1.93 metros de anchura, a las que hay que sumar una distancia entre ejes de 2.92 metros. En lo que al diseño se refiere, nos han explicado que el objetivo seguido con el Audi e-tron ha sido el de aunar los rasgos tradicionales de los modelos de los cuatro aros con nuevos elementos que introduzcan la era de la electrificación. Así pues, el nuevo SUV queda hermanado con el resto de sus homónimos gracias a la clásica parrilla Singleframe de diseño octogonal, a la línea de tornado (que une los faros delanteros con los flancos y los grupos ópticos traseros), a los ya familiares nervios del capó y al prominente pilar D. Entre los nuevos elementos de diseño cabe mencionar los faros LED con cuatro barras horizontales, el ensanche de la zona inferior de los flancos, el amplio difusor trasero que ensalza la falta de toberas, y los acabados en gris platino, enfocados todos ellos a subrayar el carácter eléctrico del nuevo Audi e-tron.

Otra novedad del modelo eléctrico la encontramos en el color opcional que ofrece, un naranja chillón en homenaje a los cables de alta tensión que se podrá escoger tanto para las pinzas de freno como para el logo “e-tron”. Además de este tono, el SUV se presenta con doce colores de carrocería, entre los que destaca el exclusivo azul Antigua, y con colores de contraste para las taloneras y los pasos de rueda.

los Virtual Exterior Mirrors del Audi e-tron

Otro aspecto a mencionar del diseño lo encontramos en su implementación, pues tal y como nos han contado desde Audi, ha sido pensado en estrecha colaboración con el departamento de aerodinámica. Esto es así debido a que, al tratarse de un coche eléctrico, la eficiencia aerodinámica es fundamental, pues una reducción de una centésima en la cifra de coeficiente equivale a un aumento de cinco kilómetros de autonomía. Por esta razón, el Audi e-tron incluye novedades como llantas de 19 pulgadas aerodinámicamente optimizadas y de ultra-baja resistencia, placas de aluminio protectoras ancladas con tornillos enrasados, parrilla activa y los retrovisores virtuales (Virtual Exterior Mirrors), montados por primera vez en un coche de producción. Todo esto ha permitido al Audi e-tron lucir un coeficiente aerodinámico de 0.28, una de las cifras tope del segmento y responsable en parte de los 400 km de autonomía en ciclo WLTP que es capaz de alcanzar el primer eléctrico de Audi.

El interior del mañana

En lo que al interior se refiere, el nuevo Audi e-tron se posiciona como un SUV premium en el que sencillez y clase se unen para maximizar el confort. Visualmente, el habitáculo queda englobado por un arco envolvente que une el salpicadero y la enorme consola central con los paneles de las puertas. El aspecto proporcionado por este concepto de diseño aporta un carácter muy lujoso, confortable y a la vez sencillo, potenciado a su vez por la calidad superior de sus materiales, tapizados e inserciones. Entre ellos destacamos el cuero Valcona, el aluminio oscuro cepillado, la madera de fresno de poro abierto, utilizado este último de manera exclusiva en el Audi e-tron, y las costuras de contraste en naranja chillón.

En lo que a instrumentación se refiere, destacan por encima de todo las dos pantallas OLED de 7″ y alto contraste asociadas a las cámaras de los Virtual Exterior Mirror. Estas, situadas en la unión del salpicadero con las puertas, nos permiten visualizar la multitud de vistas que el pionero sistema proyecta, otorgándonos un conocimiento más amplio del exterior incluso en condiciones de lluvia, nieve, niebla o total oscuridad. Además de estas dos pantallas, el e-tron incluye otros dos displays en la consola central (de 10.1″ y 8.6″ ), el Virtual Cockpit y un head-up display opcional, asociados todos ellos al sistema MMI touch response.Otra característica del interior del SUV eléctrico es su gran amplitud. Cuenta con un maletero de 600 litros, ampliables hasta los 1.725 litros, un pequeño compartimento de 60 litros bajo el capó y multitud de huecos portaobjetos. El espacio para los ocupantes es también líder en el segmento, algo que hay que agradecer a la enorme distancia entre ejes y a la práctica disposición de las baterías. Así pues, tanto los asientos delanteros como la segunda fila, que carece del tradicional bulto para la transmisión, ofrecen hueco de sobra para las rodillas y la cabeza.

puesto de mando del Audi e-tron

Esta disposición de espacio se ve favorecida por el ambiente de calma que proporciona los múltiples extras opcionales. Entre estos destacan el climatizador cuatro zonas asociado al paquete Air Quality, el paquete de iluminación ambiental, los asientos deportivos y confort multi-ajustables con función de masaje, el equipo de audio Bang & Olufsen Premium Sound con sonido 3D y el sistema Audi connect key, que permite al e-tron asociar y configurar más de 400 parámetros a los smartphones de los usuarios. Si a esto le sumamos el hecho de que, al tratarse de un vehículo eléctrico, apenas produce ruido, nos encontramos ante uno de los SUVs más cómodos de conducir.

 Tecnología, tecnología y más tecnología.

Cómo decíamos antes, el Audi e-tron representa el sumun tecnológico de la marca, no solo por ser el primer modelo de producción puramente eléctrico sino por su exquisito equipamiento tecnológico. Empezando por lo referente al info-entretenimiento el nuevo SUV incluye un sistema de reconocimiento verbal y el sistema MMI Navegación Plus. Dicho sistema, incluido de serie en nuestro país, permite la transmisión de datos a velocidad LTE a través de conexión Wi-Fi. Esto permite al conductor disponer de un sistema de planificación de ruta que incluye parámetros en tiempo real como tráfico, condiciones meteorológicas, disponibilidad de espacios de aparcamiento, localización de cargadores e incluso aviso de accidentes.

Pablo Iturmendi en el asiento del conductor del Audi e-tron

Por si esto no fuese suficiente, el Audi e-tron equipa el paquete de asistencia a la conducción Tour, que incluye control de crucero adaptativo, lector de señales, dynamic select, asistente de cruce, aviso de cambio de carril, cámara 360º, asistente de tráfico cruzado y park assist. A todo esto se sumarán posteriormente los sistemas parking pilot y remote garage parking, que gracias a los cinco sensores de radar, seis cámaras, doce sensores  de  ultrasonidos  y  el escáner  de  láser, permitirán que el e-tron aparque y desaparque de manera autónoma.

Por primera vez, motorización eléctrica

De hoy en adelante el Audi e-tron será recordado como el punto de inflexión de la marca, como el modelo con el que finalmente se cierra una etapa para comenzar la que será la nueva era de la automoción. La llegada del primer Audi puramente eléctrico, al igual que la del primer Mercedes eléctrico, sentará las bases para que, poco a poco, crezca el número de marcas decididas a dar el paso hacia la electrificación. A la vista de este contexto nos es más sencillo comprender la importancia de este modelo en general y de su sistema de propulsión en particular, pues servirá como modelo para muchos de los coches que veremos en un futuro no tan lejano.

el logotipo "e-tron" del Audi e-tron

El nuevo Audi e-tron monta dos motores asíncronos (ASM) que entregan una potencia de 300 kW (408 CV) y un par máximo de 660 Nm que, como buen eléctrico, se entregan de manera inmediata, más concretamente en 250 milisegundos. Estas cifras se traducen en una aceleración de 0 a 100 km/h inferior a los seis segundos y en una velocidad punta de hasta 200km/h. Pese a lo que podría parecer, estas envidiables prestaciones no son sinónimo de una mala eficiencia energética, sino todo lo contrario. El e-tron llegará al mercado ofreciendo una autonomía de hasta 400 km de autonomía en ciclo WLTP, lo que lo posiciona como una de las alternativas eléctricas más confiables del mercado. Esto es posible, en parte, gracias a la tecnología asíncrona de los motores, la cual permite que estos rueden de manera independiente y mejoren así tanto las prestaciones como la eficiencia del e-tron.

el Audi e-tron rodando por carretera

Pero el uso de la tecnología asíncrona no es suficiente. Para poder cubrir los 400 km de autonomía, el Audi e-tron cuanta además con la ayuda de un sistema de refrigeración que permite una gestión térmica de gran flexibilidad, una cualidad fundamental en un coche eléctrico que permite aumentar hasta en un 10 por ciento el rango de autonomía, además de permitir la carga ultrarrápida de 150 kW. A esto debemos sumarle el innovador sistema de recuperación de energía desarrollado por Audi, un mecanismo que permite recuperar energía cuando el SUV avanza por inercia y cuando frena, aumentando así un 30 por ciento la autonomía.

Pablo Iturmendi observando el Audi e-tron

Pero todo esto sería inútil si no estuviese complementado por el elemento clave de todo vehículo de propulsión eléctrica, la batería. En el caso del Audi e-tron, hablamos de un sistema de baterías de iones de litio situado bajo el habitáculo y compuesto por 36 módulos de celdas que, dispuestos en dos niveles, está protegido por el bastidor y por una estructura retráctil de aluminio, lo que anula casi por completo el riesgo de incendio en caso de accidente. Se trata de baterías de alto voltaje que funcionan a un voltaje nominal de 396 voltios, que pueden almacenar 95 kWh, que pesan 700 kg y que cuentan con un sistema de refrigeración que asegura su funcionamiento a lago plazo.

trasera del Audi e-tron

A la hora de la recarga, los clientes podrán optar entre tres opciones distintas. La más veloz requiere el uso de estaciones de carga rápida CCS, las cuales permiten cargar el e-tron a potencias de 150 kW en menos de media hora. Por suerte, gracias a la iniciativa Ionity, desarrollada por los grupos Volkswagen, BMW, Daimler AG y Ford, se espera que para 2020 haya más de 400 cargadores de este tipo repartidos por toda la geografía europea. La segunda opción es la carga de corriente alterna a 11 kW, la cual requiere un enchufe trifásico que se puede instalar en casa y que permite la carga total en ocho horas y media. Esta segunda opción se podrá acelerar a partir de 2019, año a partir del cual se ofrecerá a modo de extra un segundo cargador que permitirá duplicar hasta 22kW la velocidad de carga. Cómo última opción, y la menos recomendable, el Audi e-tron puede cargarse con potencia de 2,3kW mediante un enchufe normal de 230 voltios.

Tracción quattro eléctrica

Como colofón a todo el desarrollo tecnológico logrado con el Audi e-tron, el fabricante alemán ha querido aprovechar el lanzamiento de su primer eléctrico para presentar la nueva generación de la tracción quattro: la tracción eléctrica a las cuatro ruedas. Esta novedosa tracción permite al SUV lograr un agarre excepcional sin importar la superficie o las condiciones atmosféricas. Esto es posible gracias a que el eje secundario (en este caso el delantero) puede conectarse automáticamente, bien cuando el conductor demanda más potencia o cuando el sistema detecta falta de adherencia.

el nuevo Audi e-tron rodando en carretera

A la innovadora tracción total eléctrica tenemos que sumarse el sistema de control de frenada, un mecanismo que permite que el coche decida si emplear los frenos o los motores eléctricos cuando le pedimos que frene. Cuando la presión sobre el freno no es precipitada, el Audi e-tron acciona los motores eléctricos como alternadores, lo que permite recuperar una enorme cantidad de energía. El sistema también permite seleccionar el nivel de recuperación de energía que deseemos. Así, accionando las tradicionales “levas” podemos escoger entre tres niveles: uno bajo que permite que el coche se mueva por inercia sin ningún tipo de resistencia, uno medio que añade algo de retención, y uno alto que permite acelerar y perder velocidad presionando o soltando el pedal derecho.

trasera del Audi e-tron

Como complemento final a la tracción quattro nos encontramos un sistema de suspensión neumática adaptativa que, en función del modo de conducción que seleccionemos, permite que el coche ajuste su altura hasta en 76 mm, dotando al Audi e-tron de claras cualidades off-road. Si a esto le sumamos un reparto de pesos de 51:49, la dirección con desmultiplicación progresiva y el bajo centro de gravedad logrado por la ubicación de las baterías, nos encontramos ante uno de los SUVs eléctricos más versátiles del mercado.

el nuevo Audi e-tron edition one

El nuevo Audi e-tron se fabricará en Bruselas y se espera llegará a nuestro país a finales de este año 2018, por un precio base de 82.400 €. Pero para todos aquellos que ya hayan reservado su e-tron, Audi ha lanzado la edition-one, una versión limitada a 2.600 unidades, que incluye la exclusiva pintura azul Antigua, retrovisores virtuales, llantas forjadas de 21”, color de contraste naranja chillón, asientos deportivos, sistema de audio Bang & Olufsen Premium Sound, sistema de asistencia a la conducción Tour y faros Matrix LED con control inteligente de luces largas.