Con su debut a nivel mundial en el Salón de los Ángeles, Mazda apuesta por su nuevo prototipo de carreras, el Mazda RT-24-P, propulsado por un motor de cuatro cilindros de 2.0 litros que rinde una potencia de 600 CV (más potencia que la que entrega el V12 que monta en nuevo Aston Martin Vanquish S– usado por su predecesor- junto con un nuevo diseño exterior.
Las nuevas regulaciones de competición han permitido a Mazda incorporar el espíritu de diseño KODO para dar forma al nuevo diseño de carreras.
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John Donnan, director de la división de automovilismo de Mazda América, afirmó: «Este es un momento muy bueno para la división de competición de Mazda y para toda la familia Mazda en sí».
A pesar de compartir casi las mismas características los vehículos de carreras del IMSA SportsCar Championship y los LMP2 que compiten en Le Mans, no hay planes de incorporar el nuevo Mazda a las competiciones europeas.
Sin embargo, el nuevo coche de carreras japonés se centrará más en las competiciones de EEUU y formará parte del equipo SpeedSource. La primera carrera del calendario del IMSA tendrá lugar en enero en Daytona.