Este peculiar Rolls-Royce Phantom Rose ha sido encargado por un empresario de Estocolmo (Suecia), al que le encantan las flores. De hecho, su mujer y dos de sus cuatro hijos tienen nombres florales… Nuestro hombre quería un universo floral en su coche y para conseguirlo se han necesitado un millón de puntadas bordadas.

Torsten Müller Ötvös, director ejecutivo de Rolls-Royce Motor Cars, comentó: “El Rolls-Royce Phantom Rose es una iteración impresionante de un Rolls contemporáneo. Nuestros extraordinarios artesanos han logrado algo sublime.” Aquí podrás ver nuestro artículo sobre el departamento Bespoke y nuestra visita a la fábrica.
Unas rosas únicas en el mundo
El jardín de rosas en el hogar de Rolls-Royce, en Goodwood (UK), sirvió como inspiración para Ieuan Hatherall, diseñador del proyecto. Este es el único lugar en el mundo donde se cultiva la «Rosa Fantama» (Phantom Rose). Es criada exclusivamente para Rolls-Royce por el especialista británico de rosas Philip Harkness, de Harkness Roses.

Al respecto, Ieuan Hatherall comentó: «Hay una belleza muy singular cuando un jardín de rosas está en plena floración. Queríamos reproducir ese mismo sentimiento de asombro. Una abundancia de flores para elevar el espíritu y celebrar la belleza fugaz de la naturaleza, en el interior de nuestro Rolls-Royce Phantom Rose».
Azul pavo real
El exterior del Rolls-Royce Phantomm Rose nos recuerda al majestuoso ave. Por dentro esta tonalidad contrasta a la perfección con los tonos blancos de los asientos. Una línea bordad en ese azul recorre orgánicamente todo el interior y hace las veces de los tallos de las rosas.

No osbante, donde más se disfruta del Rolls-Royce Phantom Rose es en el asiento de atrás. Es entonces cuando se puede disfrutar de las miles de puntadas de satén. La Phantom Rose se ilustra en diferentes etapas de madurez, desde los capullos hasta la plena floración, en un diseño asimétrico que parece crecer a través del revestimiento del techo, desde la parte trasera del automóvil.

El espectacular techo interior iluminado da luz a la escena mientras las rosas se entremezclan con las luces de fibra óptica colocadas individualmente.
Desde esta privilegiada posición, uno puede admirar la Galería Phantom, creada como pieza central del interior. Los tallos de rosas bordadas trepan por los laterales, proporcionando un espectáculo para los ocupantes del Rolls-Royce Phantom Rose.
Un úlitmo toque de color
A petición del cliente, el color se introduce en forma de mariposas Peacock (pavo real) y Adonis Blue, lo que confiere movimiento al elegante motivo. La familia del propietario, como en todo proyecto Bespoke, también jugó un papel creativo. Su esposa diseñó los paraguas que se alojan en las puertas delanteras, mientras que su hija, Magnolia, definió el tono exterior del Phantom.

El satisfecho propietario comentó cuando le entregaron el coche que «quería tener flores y rosas en todas partes. Al final este Rolls-Royce Phantom Rose se ha convertido en una increíble obra de arte».