BYD llegó hace poco, pero con qué fuerza lo hizo. Desde entonces, no han dejado de sorprender modelo tras modelo. La berlina Seal es una de sus últimas creaciones, 100% eléctrica y con un diseño muy atractivo a la par que vanguardista.
Empezando por su diseño, adopta el lenguaje “Ocean Aesthetics” (estética de océano), que se traduce en una imagen dinámica, elegante y muy distintiva, al igual que el BYD Doplhin.
Respecto a sus líneas, tanto el techo redondeado como la trasera inclinada realzada por una cola de pato hacen que su figura se asemeje a un coupé deportivo. Al ser eléctrico, intenta prescindir de elementos que puedan afectar a su aerodinámica, por ello los tiradores de las puertas quedan enrasados una vez el coche está en movimiento.
En el interior, encontramos mucho espacio como para que cinco personas viajen cómodamente (y es que no todos los coches de cinco plazas son del todo prácticos). Quizás tenga que ver su distancia entre ejes, de 2.990 mm que garantiza mucho espacio para las piernas. Pero si algo es importante cuando hablamos de espacio es el maletero, que en este modelo tiene una capacidad de 400 litros, a los que debemos añadirle los 53 litros con los que contamos en la parte delantera. Tampoco faltan distintos compartimentos para almacenar pequeños objetos y el hueco bajo el reposabrazos central con el que suelen contar los eléctricos. Para aportar un último toque de sensación de espacio encontramos el techo solar panorámico de gran tamaño, que siempre es un rotundo sí.
Vayamos a lo más importante, los motores y la autonomía (además del precio). Este BYD Seal llegará al mercado europeo con dos versiones, Design y Excellence AWD, ambas con una batería de 82,5 kWh de capacidad. La versión más básica, la Design, es tracción trasera y tiene una potencia de 313 CV o 230 kW. Estas características le otorgan una autonomía homologada de 570 km.
Por otra parte, el Excellence AWD, es como indica su propio nombre tracción a las cuatro ruedas. Es además con 530 CV (390 kW) más potente que la versión Design lo que explica que pueda lograr el 0 a 100 km/h en tan solo 3,8 segundos (mientras que el Design lo hace en 5,9 s). Como es de esperar, más potencia pero menos autonomía, esta versión es capaz de recorrer unos 520 km.
Nuestra primera toma de contacto con esta berlina fue en Alemania, en un día pasado por agua, donde nos sorprendieron muy gratamente los acabados del coche, que no tienen nada que envidiarle a los de las marcas europeas.
El coche se siente ligero, nos gusta la frenada y la autonomía nos dio mucho de sí para recorrer las verdes carreteras del país germano. A mi edad, me gusta lo simple y su sistema de infoentretenimiento era cómodo y no daba ningún tipo de fallo. Estamos deseando volver a ponernos a los mandos, y la próxima vez ya estará en los concesionarios por lo que quien desee podrá ir a uno de sus puntos de venta (cada vez hay más) y solicitar su prueba.
De serie, ambos se ofrecen con un cargador de hasta 11 kW para carga en corriente alterna trifásica. También puede cargarse en un punto de carga rápida con corriente continua de 150 kW con el que la batería puede elevar su nivel del 30% al 80% en sólo 26 minutos.
Esta berlina también está a la última en cuanto a seguridad, ya que ofrece una gran mayoría de sistemas de ayuda a la conducción de serie. Aviso de colisión frontal, frenado automático de emergencia, asistente de mantenimiento de carril, cámara 360º, control de descenso de pendientes y muchos más. Es destacable también que las actualizaciones las hace a través del aire, por lo que el sistema de infoentretenimiento (con pantalla de 15,6”) siempre está a la última.
Lo mejor para el final, y es que parte con un precio muy competitivo teniendo en cuenta el mercado actual. La versión Design tendrá un precio de venta al público oficial de 46.990 euros y la versión Excellence AWD se sitúa en 48.990 euros. Se espera que llegue a los concesionarios del territorio español este próximo mes de octubre.