Jaguar F-Type Vs Audi R8 Spyder: jugando en champions

El R8 supuso un bombazo en el mundo de los supercoches, al unir el diseño y las prestaciones de los coches exóticos con la comodidad de uso y facilidad de mantenimiento de cualquier deportivo de marca premium. La baza era fácil, ya que el R8 se apoyó en la base técnica del Lamborghini Gallardo y en la base comercial y red de concesionarios global de Audi, utilizando también su mejor motor disponible: el V8 FSI del RS4. El R8 se ha vendido estupendamente, de modo que en el mercado de ocasión no es difícil encontrar unidades de aspecto irreprochable con precios de la mitad de lo que costaron nuevos, motivo por el cualquier cliente que vaya a comprarse el nuevo Jaguar F-Type puede dudar entre ambos.

El Jaguar es un coche redondo, un diseño que enamora, un chasis excelente con motor central-delantero y, en esta ocasión, tracción total, de modo que podemos disfrutar aunque el clima no sea muy benigno sin los sobresaltos que provoca la tracción trasera en un modelo con un motor tan brioso como este, que cuenta con 380 CV proporcionados por una mecánica V6 compresor. El F-Type con tracción total sólo se ofrece con caja de cambios automática, la mejor en este caso ya que, con ocho marchas, aguanta bien en ciudad, circuito o autopista. Su comportamiento es un poco más suave que el Coupé, se nota que llevamos el motor delante y permite trazar a fondo sin problemas ni bamboleos de la carrocería, estamos ante un salvaje muy bien civilizado capaz de comportarse tan bien en la ciudad como en la carretera, y con un diseño que entusiasma. Su precio es elevado, con 106.000 euros de tarifa a los que habrá que sumar algunas opciones para dejarlo a nuestro gusto.

Jaguar F-Type Vs Audi R8 Spyder: jugando en champions

Lanzado en 2007 con el motor V8 de 420 CV, el R8 llegó más adelante llegó el V10 de 525 CV y, ya en 2010 la carrocería cabrio llamada Spyder. Los casi 150.000 euros que costaba en su día se han convertido en unidades disponibles entre 85.000 y 125.000 euros. Hay hasta tres cajas de cambios disponibles, el manual de seis marchas de brillante funcionamiento, la caja manual automatizada R-Tronic, algo brusca y lenta para su uso en ciudad, y la automática de doble embrague S-Tronic, lanzada en los últimos meses de vida del modelo y francamente brillante. Si tenemos la posibilidad de echarle el guante a un manual o un S-Tronic haremos bien en comprarlo, en cambio el R Tronic es el más numeroso y fácil de conseguir.

Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro

Con precios similares, analizamos su comportamiento. Nos sentamos en el Audi mucho más bajos que en el Jaguar, y dominamos un capó corto y afilado, como es propio al tener la mecánica detrás de los asientos. El motor suena y estira de maravilla, el cambio no es progresivo, pero su funcionamiento se lleva bien con las emociones que esperamos de un supercoche, y sólo paseando en ciudad nos dará un poco de rabia con contar con el más nuevo S-Tronic. En carretera es una maravilla, y la suspensión pilotada también, ya que permite exprimir el R8 a cielo abierto de manera muy satisfactoria.

En el Jaguar F-Type vamos sentados algo más altos y por detrás de un enorme capó, al estilo de los coches clásicos de la marca como el E-Type. Su sonido es brutal, y la suspensión, también de dureza variable, permite tener varios coches en uno. En carretera agarra mucho más que el modelo de tracción trasera, más vivo y alocado. Lo cierto es que la tracción total casa a la perfección con el carácter menos deportista y más juerguista de la versión descapotable.

Jaguar F-Type

Mantenimiento

Saber que el V8 del Audi cuenta con un mantenimiento similar al de los numerosos RS4 de su generación que circulan por Europa suma puntos, ya que sus piezas no son tan exclusivas como en otras marcas de renombre y su mantenimiento no es tan complejo. Estos potenciales sustos no existen con el Jaguar F-Type, que tiene dos años de garantía oficial y que podemos ampliar hasta 3 ó 5 incluyendo el mantenimiento por cifras muy razonables. En el caso del Audi, aunque el mantenimiento general es sólo un poco más alto que en el F-Type, no sabemos qué vida anterior ha tenido cada unidad y podemos llevarnos alguna sorpresa.

Audi-AR-Spyder-0609-1

Llega la cuestión final ¿Qué hacemos si tenemos que elegir entre ambos coches? El Jaguar es carismático, capaz y tiene el plus que uno siente cuando estrena un coche. Es la actual estrella del firmamento Jaguar y uno de los deportivos más nobles y fáciles de llevar, a mitad de camino entre los deportivos de su talla y los superdeportivos de gama mucho más alta. Todo un caramelo. En cambio el Audi juega en la final de la Champions, ya que es un súper-deportivo, con todo lo que implica en cuanto a imagen, mecánica y emoción, y con una facilidad de uso mayor de la esperada. Por todo ello, y porque ya ha habido un cliente anterior que habrá sufrido la mayor parte de la depreciación, el Audi R8 es recomendable frente al Jaguar que, en cambio, tiene el atractivo que supone estrenar un coche de este calibre con todas sus cualidades tal cual fueron diseñadas en la fábrica y una imagen apasionante, pero de algún modo más discreta que el R8, algo que buscan y agradecen multitud de clientes.