Hyundai Ioniq 6 N: no todo esta perdido

Hyundai Ioniq 6 N: no todo esta perdido

¿Cómo hacer un vehículo eléctrico divertido? Parece diíficil, pero no lo es. La marca coreana ya lo hizo con el 5 N y ahora ha vuelto a repetir la fórmula con su hermano mayor.

Hyundai Ioniq 6 N: 650 CV eléctricos

Hyundai Ioniq 6 N

Ser un apasionado de los coches en 2025 es difícil. Parece que todo lo que nos encanta está siendo gradualmente prohibido por ley. Las zonas de bajas emisiones están llevando a los clásicos modernos, baratos e interesantes a los desguaces.

La tecnología de asistencia al conductor nos está alejando cada vez más del volante. Los objetivos de CO₂ más estrictos dificultan el desarrollo de coches de gasolina rápidos, mientras que las regulaciones de ruido, cada vez más rigurosas, están sofocando la vida de los pocos que se escapan.

La electrificación tampoco está del todo clara. Los fabricantes aún están descubriendo cómo construir coches eléctricos divertidos. Por muy cómodos y prácticos que sean, suelen ser demasiado estériles y pesados para convertirse en una alternativa creíble para quienes desean disfrutar de las sensaciones más mecánicas y viscerales de la conducción.

Volante Ioniq 6

Pero una marca lo ha conseguido: Hyundai. En concreto, su división N. Cuando se lanzó en 2024, el Ioniq 5 N demostró al mundo que la electrificación puede ser divertida si se delega el desarrollo de modelos de alto rendimiento en los apasionados de los coches en lugar de en los contables.

Pero ahora llega el difícil segundo e-N. El Ioniq 6 N es una versión más baja, más ancha y mucho más rápida del ágil Ioniq 6. Toma las mejores características del 5 N y las configura de forma ligeramente diferente. El chasis se ha diseñado principalmente para velocidades medias-altas, en lugar de para escapadas espectaculares que destrocen los neumáticos.

Sus motores se han rediseñado para entregar más potencia con mayor frecuencia. La aerodinámica es mejor. Los frenos son mejores. La experiencia de conducción en general debería ser mejor.

Deportivo y eléctrico, sin filtros

Trasera Ioniq 6 N

Al igual que el 5 N, cuenta con dos motores, uno en cada eje, que desarrollan una potencia máxima combinada de 650 CV y 770 Nm. Sin embargo, el 6 N distribuye esa potencia de forma diferente. Gracias a una configuración de refrigeración mejorada y a mejores imanes en el interior de los motores, puedes tener toda la potencia bajo tu pie derecho cuando quieras, en lugar de limitarte a ráfagas de 10 segundos con el botón N Grin Boost del volante.

Sven Risch, uno de los ingenieros senior del Hyundai N, comenta que este cambio fue bastante pragmático. En las pruebas en pista, su equipo se dio cuenta de que los pilotos del Ioniq 5 N no utilizaban la función N Grin Boost con la frecuencia necesaria en las rectas. Simplemente no tenían suficiente capacidad mental al conducir en curvas abruptas, y eso perjudicaba los tiempos.

Pero la vida no se trata solo de cronómetros. Lo que hace al 5 N tan bueno es la profundidad y la calidad de la ingeniería mecánica dentro de su distintiva carrocería, y el mismo enfoque se ha aplicado al 6 N.

Ofrece amortiguadores adaptativos únicos, muelles específicos, un ancho de vía más amplio y un centro de balanceo mucho más bajo; todo lo cual, según Risch, lo hará más predecible al límite de agarre. En otros coches eléctricos pesados y potentes, esa falta de previsibilidad es un problema, así que tenemos muchas ganas de descubrirlo.

No obstante, y aunque ha sido diseñado para ofrecer más agarre que el 5 N, Hyundai no ha perdido de vista la diversión que ofrece frenar de vez en cuando. De hecho, ofrece una versión aún más compleja del sistema de asistencia al derrape, que ayudará incluso al conductor más torpe a dominar ese arte. Paciencia, solo nos quedan unos meses de espera…