Carlos Sainz: «Tener en el equipo a Sébastien Loeb es un reto para mi»

Cuando te involucras en un proyecto y el en desarrollo del producto, en este caso el Peugeot DKR 2016, el resultado siempre es un éxito. El ejemplo más reciente es el Volkswagen WRC que ya va por su tercer título mundial. 

Iniciamos un proyecto de cero con una tecnología de vanguardia. Al hablarme del Peugeot que iba a incorporar muchas novedades técnicas que anteriormente no se habían utilizado en el Dakar, me gustó el reto. Indudablemente me tenía que gustar, porque desligarme de una marca como Volkswagen era muy difícil y tenía que ser un proyecto muy atractivo. Me gusta más este año, que las modificaciones que se han hecho han ido por el buen camino. Yo me muevo mucho por retos personales y este es un reto personal que algún día me gustaría conseguir, o al menos que Peugeot lo consiga.

¿Cuáles son las claves de este coche a nivel mecánico con respecto al año pasado?

El coche es bastante diferente. Es más largo, más ancho. El reparto de pesos es diferente. El centro de gravedad es más bajo y es más ligero. La respuesta del motor es más rápida y tiene más potencia. Es muy diferente al del año pasado. Hay que pensar que es más competitivo. Hay que pensar que es lo suficientemente competitivo para ganar un Dakar. El problema de esta prueba es que son muchos días, son 14 días, y las probabilidades de que ocurra algo son muy altas. Y también tienes el problema de que pasa un año hasta que vuelves.

Nani Roma decía la semana pasada que esta edición del Dakar iba a favorecer a los pilotos que venían del WRC, porque hay muchas pistas en la mayoría de las etapas. ¿Estás de acuerdo con Nani?

Si. Está claro que hay menos desierto, menos arena, hay más kilómetros de pista y más camino. También va a favorecer más a los 4X4, en este caso al Mini. Esperemos que los caminos estén muy rotos y nos metan por sitios más difíciles, que será donde nuestro coche se defienda mejor.

Respecto al emplazamiento de la carrera, este año se traslada hasta Bolivia y uno de los grandes inconvenientes de este cambio va a ser la altura. ¿Cómo crees que puede afectar esto?

Sin duda va a ser difícil. Yo nunca he corrido a 4.500 metros. He podido pasar un enlace por la cordillera de los Andes a 4.000, pero nunca una carrera entera. Creo que va ser difícil para todos, cómo nos vamos a encontrar, vamos a tener falta de oxígeno. La altitud creo que es un factor que puede marcar la diferencia en este Dakar.

Tienes de compañero de equipo a Sébastien Loeb. Sois los dos pilotos con más podios en la historia del WRC. ¿Qué significa para ti tenerle compitiendo en tu mismo equipo?

Loeb siempre es una garantía. Es un piloto rápido y es favorito para ganar esta edición. Va a ser el que ponga difícil ganar. Tener al mejor piloto de la historia del WRC, con 9 victorias en esta disciplina en el mismo equipo, para mi es un reto más.

Saliendo un poco del tema Dakar. Tu hijo Carlos está haciendo un papel excelente en la F1, pero a ti como bicampeón del mundo de rallyes, ¿no te hubiese gustado que se decantara por tu misma disciplina?

Al que le tiene que gustar es a él. A mi por supuesto me hubiese encantado que se hubiese dedicado a los rallyes, que le gustan mucho, pero le gusta más la Fórmula 1. Creo que hubiese sido capaz de enseñarle muchas cosas, que ahora en F1 no puedo enseñarle porque es un mundo muy diferente. Pero en la F1 hace lo que le gusta y eso hay que respetarlo, y encima lo hace bien. Mi sentimiento es irrelevante aquí, hay que apoyarle en lo que a él le gusta y en lo que a él le apetece.

Has apadrinado este año a pilotos españoles para que puedan continuar con su carrera deportiva. ¿Por qué crees que tiene que venir un Carlos Sainz o un Teo Martín a proyectar a los talentos españoles? ¿Cuál es el fallo en España?

Cuanto más amplia sea la base de los pilotos españoles de rallyes, mejor. Lo que ocurre es que en España en estos momentos no hay prácticamente fórmulas de promoción, y estas fórmulas con un buen premio final, son el camino para que los pilotos jóvenes se inicien en los rallyes. Tendría que haber de distintos niveles, que en España no existen y por eso pensé que había que ir a correr a Francia la Copa Peugeot. Primero porque hay un gran nivel  y segundo el premio. El premio es fundamental. Si ganas la Copa Peugeot en Francia, el premio es correr con un equipo oficial en el Mundial de Rallyes con un R5. El premio es bueno y te permite seguir mejorando y demostrando si vales o no vales.

En 2017 Toyota, marca con la que has sido dos veces campeón del mundo de rallyes, vuelve al WRC. ¿Cómo ves la vuelta de la marca japonesa?

Es una noticia excelente que una marca como Toyota, uno de los fabricantes de automóviles más importantes del mundo, vuelva al mundo de la competición, y en particular al mundial de rallyes. Creo que es una noticia inmejorable. Les deseo lo mejor, porque yo tengo recuerdo muy bonitos con ellos.