Carl F. Bucherer Manero Flyback, no hay dos sin tres

Cierto toque especial y aspecto clásico, tal es la impronta de la serie Manero de la colección de Carl F. Bucherer. Esto se hace evidente en el Manero Flyback, disponible con caja de oro rosa o de acero inoxidable, expuesto en sus distintas variantes en la feria Baselworld. La marca tradicional de Lucerna ha prestado una atención especial a la esfera del reloj para crear tres relojes de gran singularidad, cada uno de los cuales goza de un carácter propio.

Carl F. Bucherer Manero Flyback, no hay dos sin tres

Clásico, con estilo y de gran valor

El Manero Flyback es el compañero perfecto para el caballero moderno con un gusto por la tecnología refinada. El cronógrafo flyback goza de un aspecto fresco y elegante con su caja de acero inoxidable y su cabina enmarcada en un tono gris azulado mate. En función de la luz, los reflejos varían del verde suave al azul sutil. Las agujas y los índices en relieve, de acero inoxidable, así como la correa de piel de aligátor de color gris, completan la elegante imagen.

El Manero, con su caja de oro rosa de 18 k y esfera color negro mate, transmite un estilo puro y clásico. El contador de minutos situado a las 3 y el segundero pequeño situado a las 9 están ahuecados y, junto con el realce exterior en relieve, dotan a la esfera de una sensación de tridimensionalidad. El diseño del cronógrafo de oro rosa está íntimamente ligado a la nueva identidad visual de Carl F. Bucherer y causa una impresión particularmente exquisita. El principal color de la esfera galvanizada es una tonalidad del champán de un reluciente dorado. El color oro rosa de la caja armoniza con las agujas y los diez índices en relieve, así como con la esfera negra.

Líneas redondeadas clásicas

Ya sea en su versión de oro rosa o de acero inoxidable, la caja refleja las líneas típicas de la serie Manero, con su esfera clásica pero moderna, de 43 mm de diámetro. Los precisos contornos de los flancos añaden un contraste estético a las suaves curvas del bisel. Los pulsadores pulidos que controlan la función del cronógrafo no solo enfatizan el carácter clásico del reloj, sino que también resultan sumamente prácticos por presentar una amplia superficie de presión. Y es que el cronógrafo puede ajustarse con apenas una ligera presión de la yema del dedo.

Cronógrafo con funcionalidad añadida

El cronógrafo Manero Flyback cobra vida gracias al sofisticado calibre CFB 1970, un movimiento automático con una reserva de marcha de 42 horas. Las mediciones breves se regulan mediante una rueda de pilares; el calibre además presenta una función flyback que permite medir distintos intervalos de tiempo consecutivos.

El término flyback se refiere al salto atrás que realiza la aguja del cronógrafo cuando se pulsa el botón de puesta a cero, al tiempo que sigue funcionando el cronógrafo. Las agujas del cronógrafo vuelven automáticamente a cero mientras que el movimiento continúa en acción en segundo plano, permitiendo que las agujas se pongan en marcha de nuevo en cuanto se suelte el botón de vuelta a cero. En los relojes convencionales es necesario pulsar el botón tres veces para medir intervalos de tiempo sucesivos: una vez para detener el cronógrafo, otra para devolverlo a cero y una tercera para reiniciar la medida. Las tres nuevas variantes del Manero Flyback ponen de relieve una vez más el savoir-faire cultivado por Carl F. Bucherer en el corazón de Suiza desde 1888.