En el competitivo mundo de los deportivos de altas prestaciones, donde cada gramo cuenta y la eficiencia va de la mano del rendimiento, BMW vuelve a marcar el camino. La marca bávara ha presentado oficialmente el material que está llamado a sustituir a la mítica fibra de carbono en sus próximos modelos M: un innovador compuesto natural a base de lino con el que los vehículos son más sostenibles, ligeros y resistentes.

Este nuevo material, desarrollado durante más de seis años junto al especialista suizo Bcomp, se obtiene a partir del mismo cultivo que da vida a las sábanas de lino. Sin embargo, su aplicación en el mundo del motor es revolucionaria: ofrece un comportamiento estructural comparable al de la fibra de carbono, pero con una huella de carbono un 40% menor durante el proceso de producción. No solo representa un avance técnico, sino también una apuesta firme por la sostenibilidad en la automoción deportiva.

¿En qué modelos se utilizará?
La gran novedad no se queda en un simple laboratorio: este compuesto natural ha sido probado en condiciones extremas, y con éxito. El nuevo BMW M4 GT4 de competición, presentado recientemente, es el vehículo con mayor cantidad de componentes de fibra natural en toda la historia de la categoría GT. Elementos tan cruciales como el capó, las puertas, el maletero, el alerón trasero, el salpicadero y la consola central están fabricados con este revolucionario material, dejando únicamente el techo como único vestigio de la fibra de carbono tradicional. El objetivo es claro: ofrecer las mismas prestaciones, con un menor impacto ambiental y mayor circularidad.


El pasado fin de semana, en el mítico circuito de Nürburgring, la marca llevó este avance al límite durante las 24 Horas, una de las pruebas de resistencia más duras del mundo. Si todo sale según lo previsto, las fibras de lino dejarán de ser una rareza de laboratorio para convertirse en una realidad en los futuros modelos M de calle.

Con esta apuesta, BMW trabaja para mantener ese liderazgo tecnológico en el mundo de la automoción deportiva y consigue dar un paso firme hacia una nueva filosofía, donde el alto rendimiento y la responsabilidad medioambiental van de la mano, por mucho que nos duela. Lo que ayer era ciencia ficción (un deportivo con materiales vegetales) mañana podría estar en tu garaje.