Bernie Ecclestone pone a la venta su icónica colección de Fórmula 1

El legendario empresario Bernie Ecclestone, conocido por su rol crucial en la Fórmula 1, ha decidido desprenderse de su excepcional colección de coches de Gran Premio y Fórmula 1, acumulada a lo largo de más de cinco décadas. Valorada en aproximadamente 500 millones de euros, esta es una de las colecciones más completas y valiosas del mundo automovilístico. Ahora, bajo el cuidado del reconocido distribuidor Tom Hartley Jr., estos vehículos históricos están disponibles para aquellos que deseen adquirir una parte única de la historia del automovilismo.

Entre los automóviles de la colección destacan auténticas joyas que han dejado huella en la historia del deporte. Desde el Ferrari 375 F1, con el que Alberto Ascari obtuvo una victoria histórica, hasta el peculiar Ferrari «Thin Wall Special», pintado de verde, pilotado por Tony Brooks y célebre por derrotar a los Alfa Romeo de su época. La colección también incluye el Dino 246, último Ferrari campeón con motor delantero, pilotado por Mike Hawthorn en 1958, y un 312 original de Fórmula 1. Además, se encuentran piezas más recientes, como un modelo de 2002 conducido por Michael Schumacher, junto con chasis emblemáticos de Niki Lauda.

La colección también alberga todos los Brabham construidos durante los años en que Ecclestone fue propietario del equipo, incluyendo el BT49, campeón en 1981, el BT52, y el legendario BT45B “ventilador”, diseñado por Gordon Murray y ganador del GP de Suecia en 1978, que fue retirado inmediatamente tras esa única victoria. Como parte de este impresionante inventario, destacan dos coches de preguerra: un Auto Union Type C con motor V16, diseñado por Ferdinand Porsche, y un Mercedes W125, símbolos de la ingeniería automotriz de los años 30.

Ecclestone, que guarda su colección en una nave de su aeropuerto privado en Biggin Hill, al sur de Londres, ha explicado sus razones para esta venta. A sus 93 años y con una familia que abarca desde hijos mayores de 65 años hasta un niño de apenas 4 años, Bernie ha reflexionado sobre el futuro de su legado. “Amo mis coches, pero llega un momento en el que hay que pensar en lo que pasará cuando ya no esté. No quiero que mi esposa o mi familia tengan que cargar con esta responsabilidad”, declaró con pragmatismo.

Más allá de la venta, esta decisión representa un acto de desprendimiento personal. Para alguien que siempre se ha definido como un “vendedor de coches usados”, Ecclestone ha optado por soltar una carga que, aunque significativa para él, ya no considera esencial en esta etapa de su vida. En sus propias palabras: «Lo que realmente importa son las experiencias y emociones que vivimos, y para eso ya no necesito mi colección.»

Esta venta es una oportunidad única para los coleccionistas y amantes de los coches de competición de adquirir vehículos que no solo son piezas mecánicas, sino también testigos de décadas de historia, triunfos y emociones en el automovilismo.