Este proyecto piloto tiene la misión de aunar el automóvil, el hogar y fuente de alimentación combinados para dar a luz a una red de energía inteligente. La nueva iniciativa de Audi interactúa por primera vez la red eléctrica, lo que supone un gran avance de cara a garantizar la estabilidad de la misma en el día de mañana.
Audi ha puesto en marcha un proyecto piloto con hogares en el área de Ingolstadt y la región de Zurich, junto con otros socios. Este consiste en combinar sistemas fotovoltaicos de diferentes tamaños con baterías estacionarias. Un sistema de control- creado por la empresa Ampard, situada en Zurich- distribuye la energía solar de forma inteligente en función de la demanda actual o la que se pueda prever para su utilización en los automóviles eléctricos, el hogar y el sistema de calefacción.
A su vez, este proyecto permitirá interactuar con la red eléctrica, a través de una interfaz de comunicación incorporada que hace que todos los sistemas estén interconectados para formar una planta virtual de energía, dando a luz así a la red inteligente. Los dispositivos de almacenamiento conectados pueden proporcionar una potencia equilibrada, lo que se traduce en un equilibrio entre las fluctuaciones de la generación de energía y el consumo.
De esta forma, el sistema optimiza el consumo interno, los operadores de los sistemas fotovoltaicos aumentan su proporción de energía solar para su uso proprio mientras reducen sus costes de adquisición de energía.
De esta forma, con la llegada de los movilidad libre de emisiones, Audi quiere implantar servicios que vayan más allá del coche como un producto. La interacción que se consigue entre todas las áreas en la que el automóvil hace que se adapte perfectamente a un entorno conectado. Por tanto, Audi prestará atención a los servicios que implican la interacción entre el medioambiente y nuestro coche.