Hay marcas que desarrollan modelos, los lanzan y esperan a que el mercado deje de dar sus frutos para cambiarlo o mejorarlo. En Nissan se han esforzado por darle una vuelta de tuerca al GT-R desde que llegó en 2007. Ahora llega el Nissan GT-R 2017, más potente más refinado más agresivo, más de todo a fin de cuentas. Los puntos clave son el confort y la dinámica de conducción. Porque de que sirve poder mejorar un segundo por vuelta si nos rompemos una vertebra más por vuelta. Pues eso. Y el aspecto no iba a ser menos, las lineas del estilo japonés se acentúan aún más para esta actualización.
La parrilla frontal sufre el cambio más trascendental, con un nuevo marco cromado, en uve, y las luces de día en esas rejillas laterales. Más agresivo sin duda. El capó que aloja su potente V6 también ha sido rediseñado, así como el labio inferior del frontal. Si nos ponemos detrás, esa potente trasera se ha embrutecido más aún y es lo que más nos gusta de su nueva estética. Las defensas son nuevas, detalles en el difusor son algunos de estos cambios. Esto no es capricho, según Nissan hará que mejore la aerodinámica.
Su interior antes algo tosco y no tan premium será sin duda su punto fuerte para muchos futuros clientes. Adiós a las levas fijas, que ahora se reducen en tamaño e irán en la columna de dirección facilitando los cambios en el giro. El cambio se ha refinado para evitar brusquedades a baja velocidad. El habitáculo en general se presenta ahora mucho más apetecible con una calidad desbordante. Revestimientos de piel, mejor apariencia, salpicadero y botoneras nuevas, entradas de aire más deportivas. Todo se ve mejor. El sistema de info-entretenimiento es nuevo en la pantalla de 8 pulgadas.
Estamos ante una actualización de las que de verdad se sienten preparadas a conciencia. El remate, el color de la unidad inmortalizada es el Katsura Orange, un color muy japo que se podrá combinar con tapicería roja, marfil o marrón sobre negro. Así que ahora podremos tener un mejor placer de conducción y un manejo superlativos. Y lo mejor, su precio de algo más de 100.000 euros sigue estando muy por debajo de sus rivales superdeportivos.